Una cena a ciegas
Solo sabemos que es en la CDMX. El menú también es desconocido hasta que te quitan la venda de los ojos
La locación de este restaurante es un misterio. Cuando haces una reservación para conocerlo, no hay manera de saber qué platillos probarás. Por si fuera poco, una parte de la velada debes permanecer con los ojos vendados. A cambio, sus creadores te prometen un viaje culinario desde la comodidad de tu asiento.
La experiencia se llama “Cenas Secretas: Gastronomía Sensorial”, y se realiza en la Ciudad de México. Es un restaurante pop up, el cual solo se puede visitar con una reservación de por medio. Cambia de menú cada mes, y siempre se inspira en la cultura de un destino de nuestro país. Incorpora materiales multimedia para enriquecer el ambiente. “Es como trasladarte a ese estado”, explica Eduardo Chávez, uno de los creadores del concepto.
Cómo funciona
En primer lugar, debes saber que cada cena secreta se organiza para 18 personas, quienes se acomodan en una mesa comunal. Se trata de experimentar en compañía de desconocidos, convivir e intercambiar impresiones.
Para romper el hielo, los anfitriones imparten una miniclase de cocina; aprendes a preparar una salsa de molcajete o un pan de muerto.
Cuando los comensales ya están en confianza, los anfitriones comienzan a servir el menú. Si fuera de un restaurante convencional, recibirías la comida por tiempos: una entrada, un plato fuerte, el postre... Pero en este sitio, el menú degustación cuenta una historia, de la cual cada platillo representa un capítulo diferente. Puede tratarse de una narración con enfoque cómico, romántico o misterioso.
Se utilizan efectos de sonido, grabaciones hechas por locutores profesionales y elementos sensoriales. Por ejemplo, si se habla de magia o de rituales prehispánicos, no sería raro que percibieras un aroma a copal.
Mientras te retiran el plato y te sirven el siguiente, debes tener los ojos vendados con un antifaz. La narración continúa. Los miembros del staff se mueven a toda velocidad para que no notes su presencia. Eduardo lo llama “servicio ninja”. No pueden hacer ruido y trabajan con poca luz.
Las creaciones
El concepto de cenas secretas puede describirse como fine dining. Es decir, son platillos de autor, con propuesta y alto nivel culinario.
Antes de cambiar el menú del mes, se hace La ubicación del restaurante
una investigación sobre cada estado: cuestiones geográficas, productos importantes y técnicas tradicionales. También se hace un maridaje.
Aunque en ocasiones se incluyan técnicas modernas, se da preferencia a los ingredientes mexicanos. En su mesa se ha servido helado de pulque que fue elaborado con nitrógeno.
Oaxaca, Baja California y Yucatán ya han sido destinos protagonistas de la experiencia.
Todos los miembros del staff son jóvenes de 23 a 25 años. Además, los creadores de “Cenas Secretas” colaboran con otras marcas innovadoras, como la cerveza Monstruo de Agua, elaborada con agua filtrada de lluvia.
La experiencia se realiza los viernes y sábados. Tiene un costo de 860 pesos y dura cuatro horas. Se puede reservar en la plataforma The Welcomers.
Web: thewelcomers.com