Nostalgia invade a ganadores
Debbie Meyer y • Bob Beamon resaltan apoyo que les brindó la afición mexicana
La tricampeona olímpica en México 1968 en los 200, 400 y 800 metros libre, Debbie Meyer, formó parte del grupo de nadadores que marcharon en la celebración por los 50 años de los Juegos Olímpicos de México 1968.
“Amé cada segundo de este recorrido. Es mi segunda vez en México, tras los Juegos. La cultura y las personas, no importa que no hablemos el mismo idioma, siempre les tendré un gran cariño”, dijo.
Respecto a cuál es su mejor recuerdo, dejando de lado sus tres preseas doradas, Meyer señaló que fueron su entrenador y sus padres.
“Me cuesta trabajo estar aquí y que ellos ya no estén conmigo”, dijo entre lágrimas. “Su apoyo fue incondicional para que hace 50 años yo pudiera ganar”.
El estadounidense Bob Beamon, campeón olímpico en salto de longitud, con récord mundial de 8.90 metros, manifestó su alegría de regresar después del salto del siglo: “Estamos de vuelta en esta maravillosa ciudad donde todo empezó; es algo emocionante”.
El ex atleta guarda un cariño especial a nuestro país. “Muchas cosas hermosas pasaron aquí, por eso me siento orgulloso de formar parte de esta celebración”.
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