Trump vs. las marcas alemanas
Conoce cuál es la situación comercial entre EEUU y la industria alemana
La administración de Donald Trump ha puesto en más de una ocasión a temblar a varios jugadores de la industria automotriz. El presidente de Estados Unidos ha dejado claro que no está contento con la manera en la que funciona actualmente el mercado en su país.
En reiteradas oportunidades, el mandatario estadounidense ha calificado como injusta la manera en la que países como Alemania se aprovechan de las reglas de comercialización estadounidenses y que ha pensado en imponer aranceles a los productos de ese país en aras de compensar el déficit comercial. Sin embargo, los datos indican que la tendencia de compra de los estadounidenses es irreversible y, de aprobarse una eventual comisión a los autos alemanes, sus consecuencias no serían positivas para su propio mercado
En primer lugar, es importante entender el contexto. La discusión actual rodea a las principales marcas alemanas, que son los líderes del mercado en todo el mundo. Los autos premium representaron 12% de las ventas totales de vehículos en EE. UU.
Hoy, las marcas alemanas controlan el 43% de este segmento, con Mercedes-Benz como líder del ranking, mientras que las ventas de marcas premium estadounidenses (Cadillac y Lincoln) representaron solamente 12% del mencionado nicho.
Sin embargo, el mayor problema para Trump es que la mayoría de estos autos no se producen localmente. De hecho, 70% de los autos premium vendidos por Mercedes en EE. UU. se producen en Alemania. La firma de la estrella solo produce 26% en la nación americana y, para malestar del presidente estadounidense, este año se comenzó a fabricar la versión sedán del Clase A en la planta conjunta entre Daimler y Nissan que se ubica en Aguascalientes, México.
Un caso bastante similar es BMW, quienes tienen una composición 64% frente 36% para los automóviles de fabricación alemana y estadounidense, respectivamente. En otras palabras, los líderes actuales en el mercado de autos premium en los Estados Unidos no producen la mayoría de sus autos a nivel local y como aderezo a la receta, la firma bávara también producirá un auto en México en los próximos meses.
Para darte un mejor contexto del enojo de Trump en contra de las marcas alemanas, hemos realizado un gráfico que te ayudará a entender más claramente el panorama de manufactura entre ambos países.