CASLAVSKA MARAVILLA
Domina la carismática gimnasta checoslovaca en el cerrado duelo con la soviética Kuchinskaya
En los ejercicios obligatorios, que marcaron el inicio de la gimnasia en los XIX Juegos Olímpicos, todos los competidores realizan las mismas rutinas. Ayer, las calificaciones más altas dada su impecabilidad, perfección de movimientos y coordinación, fueron para la supercampeona Vera Caslavska.
La checoslovaca, dueña de múltiples coronas, incluyendo las más importantes como son la olímpica y mundial, se situó al término de la primera fase al frente de las 141 gimnastas que durante las dos sesiones, que constó la parte inicial de la competencia, dejaron maravillados a los 25 mil aficionados que se reunieron en el Auditorio Nacional para verlas en acción y a un incalculable de personas que no perdieron ningún detalle a través de la televisión.
El duelo esperado, ansiado no por días sino por años por los aficionados no solo mexicanos sino extranjeros, entre la checa Vera Caslavska y la soviética Natalya Kuchinskaya tuvo un sesgo definitivo a la par que desalentador para esta última y la legión de admiradores que poseé, al perder el equilibrio e interrumpir su rutina en las barras asimétricas y sacrificar un valioso punto por esa caída, que la colocó en desventaja con la checa, a quien todo le salió de maravilla en la primera reunión.
Natalya, como el resto del equipo de su país, comenzó a trabajar en manos libres, donde alcanzó la máxima puntuación de la jornada (9.75) contra 9.70 de Vera.
En caballo transversal, Vera alcanzó casi lo perfecto y ello le redituó un 9.90, para ser el primera contra un 9.75 de Kuchinskaya, quien junto a su compatriota Zanaida Voronina, la colocó en el segundo puesto de este aparato.
Caslavska tuvo en las asimétricas estupenda intervención rematada con magnífica salida, lo que le valió un total de 9.60 puntos.
La soviética, en su correspondiente intervención, entró con facilidad, tomó el impulso necesario para ascender por la barra baja, después cambió a la alta donde efectuó con propiedad los movimientos, pero al tratar de hacer contacto con la baja, se zafó y cayó, lo cual fue penalizado con un punto, que a estas alturas, significó ceder terreno.
Este error pudo hacer que Kuchinskaya pierda la competencia, ello a menos que suceda algo imprevisto o logre recuperar lo perdido, aunque para ello debe anotarse que luchará con una Caslavska que se encuentra más conciliada con los aparatos de competencia. •