Deporte motor.
Visitamos las oficinas centrales del Renault F1 Team para conocer sus planes a futuro
El equipo francés
Este año se cumplen 40 años desde que Renault decidió involucrarse en el máximo serial de automovilismo mundial. En ese entonces, presentaron lo que se denominó como el R.S. 01, un auto que no logró completar ninguna de las carreras en las que participó en la temporada de 1978.
Lejos de ser un fracaso, el primer ejemplar del “Equipe Renault F1” representó algo que, en la actualidad, es el estándar mecánico de todos los autos que compiten en este serial, pues fue el primero en tener un motor turbocargado.
La apuesta por el desarrollo de tecnología ocasionó que en 1982 llegaran los primeros triunfos para el equipo francés y, de manera más importante, encauzaran la carrera de un piloto que, más adelante, se colocaría como uno de los más grandes nombres en la historia de este deporte: el tetracampeón mundial, Alain Prost.
Naturalmente, cuando pensamos en los logros de Renault en Fórmula 1, nos remitimos a 2005 y 2006, cuando dominaron el campeonato de la mano del piloto español Fernando Alonso, para destronar al máximo campeón de la categoría: Michael Schumacher.
No obstante, a lo largo de sus idas y venidas en la Fórmula 1, el equipo francés se ha caracterizado por buscar de manera inteligente (sin los grandes presupuestos de escuderías como Ferrari, Mercedes-Benz o McLaren) cómo destacar con desarrollos que, en un mediano plazo, resultan ser el camino a seguir para el resto de los constructores.
A dos años de su retorno como equipo formal, el ahora Renault Sport Formula 1 Team nos invitó a su planta de fabricación en Enstone, Inglaterra, para conocer los esfuerzos que están realizando para ser contendientes del título de pilotos y de constructores para 2020.
Las herramientas necesarias. La máxima que señala que para ser de los mejores es necesario de rodearse de ellos se sigue al pie de la letra en la nueva etapa de Renault. Por eso mismo, el equipo francés ha cooptado a directivos, ingenieros y pilotos que les ayuden a ser parte de un proceso de cinco años que tenga como resultado ser campeones mundiales en 2020.
Durante la visita a la planta de Enstone, pudimos conversar con Bob Bell, director técnico del equipo, quien tiene experiencia en el desarrollo de los exitosos McLaren de la década de los ochenta y noventa. Al respecto, él considera que la llegada de Daniel Ricciardo al equipo es una inmejorable oportunidad para desarrollar sus próximos autos para competir con las escuderías de más presupuesto.
“Al momento de que Daniel estaba disponible, la orden de todos los del equipo fue de abrir la cartera y convencerlo de venir con nosotros. Todos sabemos que tiene la capacidad de ser campeón del mundo y queremos que eso suceda con nosotros”, comenta Bell.
No obstante, en Renault son conscientes que no solo es necesario un buen personal para lograr los resultados, sino que también estos necesitan las herramientas adecuadas para poder alcanzar el éxito.
Por esa razón, el equipo francés realiza una inversión anual de tres mil millones de dólares para ampliar sus instalaciones, comprar más equipo y dejar de depender de proveedores externos (como lo hacen en Ferrari, Red Bull y Mercedes-Benz).
De esta manera, se han hecho de su propio túnel de viento, impresoras 3D y simuladores de carrera de clase mundial.
“El esfuerzo que está haciendo la gente de Renault es enorme y, como equipo, tenemos que estar a la altura. Este año, podríamos considerarlo como una decepción en nuestro rendimiento, sin embargo, no podemos perder de vista que nuestra meta es 2020 y que estos años serán de preparación para ser los mejores”, concluye el legendario Bob Bell.