¡No abandones el gluten porque si!
Reducir sustancialmente o eliminar los alimentos que contienen gluten de la dieta puede tener efectos negativos tanto para la salud como para la economía. Algunas de sus desventajas son:
Deficiencia nutrimental. Muchos alimentos libres de gluten no están enriquecidos y pueden ser deficientes en distintos nutrimentos como ácido fólico, hierro, niacina, riboflavina y tiamina (vitaminas del complejo B).
Falta de fibra en la dieta.
Dietas ricas en sodio y grasa. La composición nutricional de los productos procesados sin gluten han demostrado tener niveles más altos de grasa, grasas trans y sal en comparación con sus contrapartes que contienen gluten.
Falta de proteína. Suelen tener un menor aporte de proteína que los alimentos tradicionales.
Inflamación. Algunas de las féculas utilizadas en sustitución de harina tradicional, llegan a ser más inflamatorias que el mismo gluten.
Consumo excesivo de carbohidratos. A diferencia de lo que se cree, los alimentos sin gluten no son “light” y sí aportan carbohidratos.
Son alimentos mucho más costosos. Se estima que los productos sin gluten son 242% más caros que los normales.
Son dietas difíciles de llevar pues no solo el pan y la pasta contienen gluten. El gluten también se esconde en otros productos como salsa de soya, cerveza, suplementos vitamínicos, algunos medicamentos e incluso los bálsamos labiales.