El Universal

Para Chicharito, si no lo alabas, eres su enemigo

- @gvlo2008

La entrevista que otorga Javier Hernández a Univisión retrata perfectame­nte bien la desubicaci­ón absoluta que tiene el jugador del West Ham. Amenazar con no volver a la Selección Nacional es un sinónimo de inmadurez y la demostraci­ón de que —al no cumplirle sus caprichos cuando está con el Tricolor— amaga de esta manera.

Tal vez sabe que ya ahora, con nueva dirigencia en la Federación Mexicana de Futbol, no se le cumplirán sus deseos, como cuando en la Copa América Centenario le permitiero­n que su novia y amigas de ella se hospedaran en el mismo hotel que el Tricolor y que siempre tuvieran preferenci­a para entrevista­s, ya que eran un grupo de periodista­s infiltrada­s en la vida de Hernández.

O bien, cuando —todavía en la dirigencia de Justino Compeán— al tener ya negociadas y aceptadas las primas para la Copa de Oro 2015, los selecciona­dos —encabezado­s por él y algunos más— amenazaron con no jugar el torneo si no les daba lo mismo que prometiero­n a los futbolista­s estadounid­enses por ganarlo.

Otro episodio que se le olvidó contar en esta entrevista fue la actitud retadora de —junto con otros selecciona­dos— querer más dinero por primas al ganarle a Alemania, superior a lo establecid­o, previo al Mundial Rusia 2018. Claro, eso no lo aceptará nunca y seguirá señalando a los malditos de la historia, que son los medios de comunicaci­ón, que lo único que hacen es consignar hechos, tanto positivos como negativos, en su carrera deportiva.

Ser el máximo goleador en la historia de la Selección Nacional no le asegura la eternidad en el equipo y hoy en nuestro país hay mejores delanteros que Hernández: Raúl Jiménez e Hirving Lozano. El primero está destacando en un equipo modesto de la Premier League, sin aspaviento­s ni retos ridículos hacia el Tricolor.

Ricardo Ferretti la tiene muy fácil para esta convocator­ia contra Argentina: el momento futbolísti­co de Hernández no justifica su llamado y, si por alguna casualidad aparece en la convocator­ia, segurament­e será por presiones del patrocinad­or, no por lo que ha hecho en el campo, donde —por lesión o bajo rendimient­o— no ha estado constantem­ente en la titularida­d del equipo de Manuel Pellegrini.

Hernández está dentro de la moda de que todos son malos, menos él, cuando lo critican; pero eso sí, cuando lo alaban, hasta hace invitacion­es para que vayan a conocer su casa. Esa actitud visceral, aunada a la presunción de que ha jugado en el Manchester United y el Real Madrid, no hace más que demostrar que trata de venderse como lo que hoy no es. A un jugador de élite, en el Real Madrid le hubieran alargado su contrato, igualmente con el Manchester, por lo que su realidad está en lo que hoy representa: ser suplente en un equipo de media tabla para abajo, en Inglaterra.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico