Francia es sometida
La victoria de Holanda sobre la selección campeona del mundo provoca además el descenso de Alemania
Rotterdam.— Holanda pasó por encima de Francia y venció (2-0), con goles de Georginio Wijnaldum y Memphis Depay, en un partido en el que los galos no fueron capaces de reaccionar y dieron una imagen alejada de la selección que se alzó con el Mundial.
Con su victoria, la Naranja Mecánica provoca el descenso de Alemania a la Liga B de la Liga de las Naciones, y depende de sí misma para proclamarse campeón de su grupo, siempre y cuando venza el lunes a los germanos.
Francia salió al césped fiel al estilo demostrado en el Mundial de Rusia 2018, asentado atrás, esperando su momento y creando peligro a base de contraataques. La Naranja Mecánica en cambio mostró un ímpetu arrollador desde el minuto uno.
Depay y Wijnaldum lo intentaron varias veces sin éxito en los primeros minutos, pero a mitad de la primera parte, los galos parecieron recuperar terreno y posesión e hilvanaron jugadas de peligro.
Cuando parecía que ambas selecciones se irían al descanso en tablas, un resultado que hasta el momento parecía justo, una ocasión que no parecía conllevar peligro supuso el principio del fin de los franceses.
El mediocampista Steven Nzonzi calculó mal un despeje de cabeza de un pase alto de Frenkie de Jong y la cedió hacia atrás, permitiendo un disparo a bocajarro de Ryan Babel que fue rechazado por Hugo Lloris con los pies, pero el balón quedó a merced de Wijnaldum, cuyo derechazo llevó al 1-0 en la pizarra y al delirio de la grada holandesa.
El mazazo recibido por Francia fue un gol psicológico no sólo por el minuto en el que se marcó, uno antes del descanso, sino porque a partir de ahí desapareció.
Los hombres de Ronald Koeman asediaron el área rival por tierra, mar y aire con varios disparos, pero los reflejos de Lloris fueron los únicos culpables de que Francia no volviera a casa con un saco de goles. Los visitantes lo intentaron, sin éxito, en los minutos finales con un par de jugadas a balón parado, pero el penalti marcado por Depay (96’) cuando el partido estaba prácticamente terminado, sentenciaba a los Bleus.
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