Los clásicos

Todos hemos escuchado la frase “fue mejor la novela que la película” y es verdad: en muchas ocasiones los libros superan a sus adaptaciones cinematográficas. Esta afirmación no aplica para estos filmes, que incluso pueden llegar a ser mejores que sus antecesores escritos.

Joyas de la pantalla que nadie se debe perder y pueden ser conseguidos en prácticamente cualquier lugar para verlos cómodamente desde casa. Tampoco debemos dejar de lado las novelas en las que fueron basadas, muchas de ellas consideradas como “infaltables” en el estante de cualquier hogar.

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Ganadora de cinco Globos de Oro y tres Oscar en 1972, la película de “El Padrino” es considerada como una auténtica obra de arte para la industria del cine. Dirigida por Francis Ford Coppola, relata la vida de Don Vito Corleone, un respetado y temido jefe de una de las cinco familias mafiosas existentes en Nueva York. El papel de Don Corleone es interpretado por el reconocido actor estadounidense Marlon Brando; un personaje que seguramente perdurará a través del tiempo.

A pesar de que Coppola respeta la esencia de la novela de Mario Puzo, publicada apenas tres años antes que el estreno de la película, le imprime su particular sello; como se puede ver en la majestuosa transición de escenas perfectamente hiladas en la escena final de la película, algo que ni siquiera el propio Puzo pudo haber imaginado.

Otra de las películas que es considerada mejor que la novela es: “El Silencio de los Inocentes”. Si aún no la has visto, esta es una gran oportunidad. Uno de los mejores filmes de terror psicológico, que no te permite ni pestañear. Este thriller dirigido por Jonathan Demme y protagonizado por Anthony Hopkins en el papel del asesino serial, el Doctor Hannibal Lecter, fue ganador de cinco Oscar, incluyendo el premio a mejor guión adaptado.

El libro de Thomas Harris en el que se basó, no se queda atrás en calidad y mantiene al lector al filo de la silla. Sin embargo, la grandiosa recreación de Hopkins, y los recursos visuales y narrativos utilizados por el director de Nueva York hacen que “El Silencio de los Inocentes” pasé a la historia gracias al filme.

Si hablamos de icónicos directores, en la lista debe incluirse sin lugar a dudas a Stanley Kubrick. Uno de los cineastas más galardonados del siglo pasado, que ha marcado a la industria con cada una de sus películas, una de ellas (tal vez la más famosa) es “El Resplandor”. El reto no era fácil, ya que el libro fue escrito por Stephen King, una auténtica leyenda de los libros de ciencia ficción.

Sin embargo, ambas versiones se han convertido en éxitos rotundos. Kubrick era el único capaz de llevar una novela así a los más altos niveles en la pantalla grande: un relato que logra ponernos al límite e introducirnos en la mente de Jack Torrence, así como el deterioro mental que sufre a lo largo del relato y lo lleva a la locura total. No podemos olvidar la increíble actuación de Jack Nicholson, un inolvidable personaje que lo impulsó hasta lo más alto de su carrera.

“El club de la pelea” de David Fincher es otra cinta imperdible. Basada en la también controvertida obra de Chuck Palahniuk del mismo nombre, nos lleva por las oscuras calles de Estados Unidos y los problemas existenciales que sufre un hombre promedio de la ciudad, que se ve ahogado por una sociedad consumista.

El complemento perfecto para ver esta película es la presencia de Brad Pitt y Edward Norton, una pareja de actores que se compenetran de manera perfecta durante las dos horas de duración.

Las actuales

Si lo que buscas son películas un poco más actuales, entre 2015 y 2017 también hubieron estrenos bastante esperados basados en novelas populares. Tal es el caso de “Z, la ciudad perdida”, una película inspirada en el Best Seller de David Grann. Dirigida por James Gray, con un gran reparto conformado por Sienna Miller, Charlie Hunnam y Tom Holland. La historia narra la historia de un explorador británico llamado Percival Fawcett, desaparecido en el Amazonas, mientras se encontraba en búsqueda de una ciudad antigua.

El libro de Grann es considerado como una de las mejores reconstrucciones históricas, una obra que trasciende épocas y que sumerge al público en los peligros del Amazonas en los años veinte. La película no se quedó atrás, una buena ejecución que recupera muchos aspectos de la novela y del cine clásico.

Otro libro llevado a la pantalla es Martian”. La novela de Andy Weir, publicada en 2011 logró furor en todo el mundo, pero la película dirigida cuatro años después por Ridley Scott (también director de Gladiador) consiguió cosas aún más importantes y se alzó como una de las favoritas en el género de ficción en el espacio. Matt Damon es un astronauta (Mark Watney) que queda varado en Marte y busca sobrevivir en la hostil atmósfera de este planeta. A pesar de ser una ejecución casi exacta, se puede decir que a Watney le va mucho peor en el libro, enfrentándose a mayores retos y dificultades de lo que nos muestran en pantalla.