¡Qué comience la Fiesta!
Después de desgarrarnos las vestiduras, sacarnos los ojos y deprimirnos sin sentido por nuestra amada Selección Mexicana que sigue su travesía a la nada, en el plano local se viene la época de goce.
La etapa en la que podemos presumir nuestra alta competencia. Es momento de recompensar a los aficionados con la mejor oferta semestral de nuestra pelota. Se avecina una Fiesta Grande con los equipos más constantes en los torneos cortos. Los proyectos deportivos que saben meterse a la llamada Liguilla.
Veremos la lucha de los tres equipos capitalinos contra los del norte y al siempre temible Toluca. Este fin de semana se acomodarán los cuartos de final con los últimos boletos y con eso vendrán las probabilidades de tener una gran final, sea la historia que sea, sin importar la llave. Es decir, cualquier final capitalina sería una locura.
Ver un Cruz Azul vs América o Pumas con el partido de vuelta en el Azteca para quitarse la maldición celeste sería un agasajo. Otra posibilidad que se pueda dar es una revancha en regiolandia, o que cualquiera de los dos equipos regios no permitan un bicampeonato de Santos. También sería frenético ese escenario. Sin menospreciar cualquier historia del averno, ese lugar tan común para jugar finales contra el Toluca.
Y el albur de que podría venir otra final entre equipos de la CDMX vs equipos de Monterrey, rivalidades que siguen creciendo. A falta de las golpeadas Chivas, que buscarán salvar el prestigio en el Mundial de Clubes, tendremos a la crema y nata de nuestras Liguillas, las escuadras que le dan color y relevancia. Así que pónganse cómodos, que llegó el momento de gozar lo mejor de nuestro futbol.
¡Bienvenidos, bienvenidos! ¡Qué comience la fiesta!
•