Urzúa, como entre cuates
A quien le fue bien en términos generales fue a Carlos Urzúa. Nos dicen que en la Comisión de Hacienda convenció a los diputados para que lo ratificaran por unanimidad. Nos cuentan que el matemático con doctorado en Economía no leyó ningún discurso, más bien echó mano del recurso de profesor. Su exposición se basó en un recuento del panorama, que aderezó con pequeños apuntes de historia económica. De traje azul, con corbata guinda —color que ahora está de moda— durante su speech habló claro y didácticamente sobre su trabajo al frente de la SHCP y los proyectos del nuevo gobierno, como si estuviera entre amigos. Nunca utilizó el lenguaje del protocolo legislativo, sino recursos literarios para hablar de las maravillas imponentes de la naturaleza en el sureste para vender el proyecto del Tren Maya. El funcionario canceló la conferencia tempranera que daría en Palacio Nacional, pero para compensar la desmañanada, agradeció la presencia de la prensa en su comparecencia.