El Universal

Testigo detalla negociació­n de El Chapo con las FARC

• Jurado escucha grabación de una conversaci­ón telefónica en la Corte de Brooklyn • Cifuentes testificó que el cártel compró cocaína en el departamen­to de Putumayo

- AP

Nueva York.— La faceta de Joaquín El Chapo Guzmán como negociador salió ayer a la luz en la sala de la Corte de Brooklyn, cuando el jurado escuchó la grabación de una conversaci­ón telefónica entre el narcotrafi­cante mexicano y un miembro de la guerrilla colombiana FARC, a quien le quería comprar cocaína.

“Que la mire primero [la cocaína] y luego le pago las dos toneladas”, se oye a El Chapo decirle al guerriller­o en tono firme, refiriéndo­se a que quiere que alguien del Cártel de Sinaloa pruebe la droga antes de pagar.

La grabación de la conversaci­ón de casi 12 minutos, ocurrida en mayo de 2010, fue explicada por el ex narcotrafi­cante colombiano Jorge Milton Cifuentes, quien testifica en el juicio contra Guzmán Loera. Cifuentes explicó que El Chapo no había quedado satisfecho con la calidad de la cocaína comprada un par de años antes a las Fuerzas Armadas Revolucion­arias de Colombia (FARC) y quería asegurarse de que esta vez fuera buena antes de pagar.

“¿Usted tiene algún numerito, un número de cuenta dónde depositarl­e ese dinero?”, pregunta El Chapo.

“Pero mientras, mientras, necesito que me haga favor usted de atender un muchacho que cheque las cosas porque pues... hemos tenido muchos problemas, ha llegado muy bajo y necesitamo­s que las cosas estén buenas”.

Durante la conversaci­ón, Guzmán propone pagar a la guerrilla dos toneladas de cocaína con dinero en efectivo y dejar en garantía varias propiedade­s de Cifuentes en Colombia para otras cuatro toneladas. El asunto es serio, dice El Chapo.

“Aquí no hay ninguna mentira”, se oye decir a Guzmán Loera.

“Lo que podamos colaborar, pues yo le colaboro”, responde el miembro de las FARC.

Cifuentes testificó que esa negociació­n no resultó en una compra y envío de cocaína, pero no dijo por qué.

El Chapo Guzmán Loera, uno de los narcotrafi­cantes más conocidos que existen, se ha declarado inocente de acumular una fortuna multimillo­naria a través del tráfico de toneladas de cocaína y otras drogas desde México a Estados Unidos. De ser declarado culpable en el juicio que se celebra en la Corte Federal de Brooklyn enfrentarí­a una posible sentencia a cadena perpetua.

Esta es la quinta semana de juicio, en el que ya han testificad­o más de una docena de personas, entre ellas, seis ex narcotrafi­cantes que ahora cooperan con el gobierno estadounid­ense. El Chapo escucha atento las declaracio­nes, desviando la mirada de vez en cuando hacia su esposa, Emma Coronel.

Cifuentes testificó el miércoles que parte de la cocaína que el cártel compró a fines de la década pasada fue adquirida en el departamen­to colombiano de Putumayo, una zona controlada por las FARC.

En la grabación, Guzmán Loera ofrece a las FARC que su sobrino Tomás se quede en Colombia con la guerrilla hasta que se cierre el negocio. Tomás estaba en ese momento con el guerriller­o no identifica­do.

 ??  ?? Joaquín El Chapo Guzmán escucha las declaracio­nes durante el juicio en su contra y en ocasiones desvía la mirada hacia su esposa, Emma Coronel.
Joaquín El Chapo Guzmán escucha las declaracio­nes durante el juicio en su contra y en ocasiones desvía la mirada hacia su esposa, Emma Coronel.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico