Tuvo su primera práctica en el y firmó autógrafos
• Woods Chapultepec
El WGC México Championship presenta a 13 de los mejores 15 golfistas del mundo. El británico Justin Rose, número uno del ranking del PGA Tour, no asistió, ya que nunca lo contempló en su agenda.
Para esta edición, también hay espacio de revancha, como el caso de Justin Thomas, quien perdió el hoyo de desempate ante Mickelson.
“Es un grandioso campo pequeño, con mucha maña”, dijo el estadounidense. “Me siento muy cómodo aquí, me eleva el juego y me pone en una posición para ganar”.
El WGC de México anticipa una fuerte entrada, por la cartelera que presenta y tiene una bolsa de 10 millones 250 mil dólares a repartir entre los jugadores.
• En su primer día en el Club Chapultepec, Tiger Woods dio una muestra de lo que se espera de él durante el WGC México Championship: lujo, espectáculo y todas las miradas sobre él.
El ex número uno del mundo nunca había jugado un torneo en un campo tricolor. Apenas ayer tuvo su estreno en el césped mexicano rumbo al certamen.
El estadounidense llegó unos minutos antes de las 12 de la tarde a las instalaciones del Club Chapultepec. Tuvo bastante tiempo de relajación antes de comenzar su primera ronda de práctica en la Ciudad de México. El Tigre hizo su rutina en el gimnasio y almorzó, antes de salir al sol capitalino.
Joe LaCava, su caddie, fue el primero en aparecer y colocó la bolsa de bastones sobre el putting green. Algunos minutos después, por fin, Woods lució listo para arrancar sus actividades.
Tras 30 minutos de calentamiento en el driving range, se dirigió al tee de salida del 10, para jugar nueve hoyos, en compañía de Justin Thomas y Billy Horschel, completamente desconocidos ante la atención del público sobre la estrella.
Las puertas del Club estuvieron abiertas solamente para los socios, quienes tuvieron la primicia de observar el corto recorrido del 80 veces ganador del PGA Tour.
Con la mirada enfocada en el objetivo, Woods parecía jugar solo. Ante algunos aplausos de los presentes, saludaba con la gorra, pero nada más. Cuando Tiger juega, sin importar los cientos de seguidores a su alrededor, no lo distrae ni una mosca.
El ex número uno reconoció los fairways, las caídas de los greens y el ambiente de la capital mexicana.
Con 43 años de edad, la altitud y la contaminación pueden perjudicar su juego, por lo que la estrategia física será fundamental para que tenga una buena participación.
Woods firmó autógrafos a los pequeños que lo esperaron en la bandera del 18 y regresó a la casa club para bañarse y regresar a su hotel, ubicado en Polanco.
Hoy por la mañana, el emblemático jugador tendrá su primera sesión de preguntas y respuestas con los medios de comunicación. Mañana, a partir de las 13:03 horas, el Tigre compartirá grupo con el mexicano Abraham Ancer y el estadounidense Bryson DeChambeau.
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