De puesto en puesto
Peregrinaje por útiles escolares
El regreso a clases está encima. Padres recorren pasillos de la plaza comercial y puestos ambulantes de la calle Mesones en busca de los mejores precios para comprar útiles. Los comerciantes opinan que las ventas no han sido buenas. “La gente regatea más y compra menos”, dice Marta.
Para comparar precios, hombres y mujeres recorren pasillos de la plaza comercial y puestos ambulantes de la calle Mesones, en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
Se detienen entre puestos y locales que ofrecen plumas, lápices, cuadernos, mochilas, todo para el regreso a clases este lunes.
“Yo vengo de Tepotzotlán; hago dos horas de camino, pero son mejores los precios. Hay mucha gente porque ahorita a todos ya nos dieron las listas de útiles y hay que buscar bien porque en unos lados es más económico, cinco o 10 pesitos, pero algo es algo”, dijo la señora Edith, quien junto a su hija y sus nietas compraban en un puesto ambulante pegamento en barra de dos por 15 pesos.
Hay dos escenarios: uno en la Plaza Mesones y otro sobre la calle. En el primero hay poca gente, las personas entran como salen, es sencillo caminar sobre algunos pasillos; sin embargo, en otros hay que esperar a que dejen de comprar para poder caminar.
En el segundo la afluencia es mayor, aunque los espacios son más amplios, entre comerciantes, padres, madres de familia y los diablitos para cargar mercancía, el paso es lento y tardado.
Adentro, los voceadores ofertan cuadernos sencillos de uno en 15 o a 13 pesos el mayoreo, afuera son más baratos, pues hay desde 10 pesos uno u ocho al mayoreo.
También venden cuadernos de marca, son los de precio más alto, hasta 60 pesos y son los que más se venden “las listas de útiles ya son selectivas, antes nomás te pedían un cuaderno cuadro chico o cuadro grande, ahora tienes que llevar hasta la marca que les piden y no es cualquiera, piden de los caros”, declaró Roberto Romero, comerciante de la plaza.
También dijo sentirse preocupado pues lleva una semana esperando a la gente y no ha visto los resultados, “este ha sido el peor para la venta de útiles. Venías en otros años y no podías ni caminar por toda la gente que había”.
María Fernanda viene del Estado de México, carga a su bebé de meses y junto a su hija, que el lunes entrará a quinto año de primaria, hace su primera compra en uno de los locales de la plaza, gastó 90 pesos en cuadernos y no pensaba desembolsar más de mil pesos: “Apenas voy empezando, yo creo que sí lo voy a lograr”
Afuera, en uno de los puestos de mochilas, un grupo de mujeres preguntó por una con lentejuelas: “Venimos aquí porque los precios son más baratos y luego está esa mochila de mil 400 pesos”.