De Yuri Zatarain
Esta semana recibí una sorpresa y, gracias a eso, me reuní con amigos tapatíos. Enrique y María Landa ofrecieron una espectacular cena en honor del artista plástico Yuri Zatarain. Él vino a la Ciudad de México como invitado de honor al evento Pop Up México, Tercer encuentro de música, danza y artes visuales en el Conservatorio Nacional de Música, organizado por Verónica Salame, quien se enfoca en la promoción de Bosque Real.
Hubo un espectáculo de danza, que corrió a cargo de Elisa Carillo, quien se presentó junto con su marido. La sección de arte fue responsabilidad de Betsabeé Romero, quien mostró papalotes de Francisco Toledo, como homenaje póstumo. Zatarain, por su parte, expuso dos cuadros monumentales que seguirán exhibidos todo el mes patrio en el Conservatorio.
En la hermosa casona donde se llevó a cabo la reunión, me encontré a grandes amigos como Aarón Lazcano. También asistió Yoli Sánchez Bribiesca, propietaria de Imaginarte, en Guadalajara, a quien le cantamos Las Mañanitas, porque hace unos días fue su cumpleaños, y María Landa, la anfitriona, no quiso que pasara desapercibido.
Enrique Landa, chef, empresario y anfitrión, preparó deliciosas botanas, entre quesos, uvas, mermeladas y jocoques, que me hicieron la noche.
Después, cerca de las 23:00 horas, pasamos a la espectacular mesa que decoró María con velas y jacarandas, digna de retratarse. Poco después, sirvieron mi ensalada favorita: una exquisita Wedge perfectamente preparada y sazonada; a continuación, un Filete a la pimienta con fetuccini.
Entre risas, selfies y anécdotas transcurrió el tiempo sin darnos cuenta, hasta que tuve que despedirme, no sin antes desearle el mejor de los éxitos a Yuri, quien muy pronto terminará de construir lo que será una de las galerías más bellas del país y a cuya apertura, por supuesto, asistiré.
La cena inició a las 19:30 y, me contaron, terminó cerca de las 3:00 a.m. Yo me salí antes porque al día siguiente debía levantarme muy temprano para asistir a una importante asamblea.