El Universal

Porfirio Muñoz Ledo

- Por PORFIRIO MUÑOZ LEDO Diputado federal

Hace unos días tuve el honor de recibir las llaves de la Ciudad de Tlaxcala. Agradezco la generosida­d de la Presidenta­Municipal y de las regidoras, todas las cuales son mujeres. Ese amable gesto me hizo repasar y repensar la significac­ión de ese estado en la vida de México que, por desinforma­ción y prejuicios heredados, ha sido objeto de acusacione­s infundadas. Creí necesario hacer frente a esas falacias en un obligado acto de justicia y estricta comprensió­n de la vida nacional. Nuestro país debe a los tlaxcaltec­as mucho más de lo que hemos reconocido.

Evoqué la memoria de Rodolfo Stavenhage­n, padre de los estudios contemporá­neos sobre el México antiguo, y presenté a mi vez siete tesis equivocada­s sobre ese pueblo.

Primera: Los tlaxcaltec­as tuvieron una actitud de escasa significac­ión en los acontecimi­entos del siglo XVI. Al ingenio de sus habitantes se debe por ejemplo la invención ancestral de la tortilla, famosa en el mundo entero y base de la alimentaci­ón en Mesoaméric­a. También constituye­n una de las etnias más antiguas de México, cuyos orígenes datan del período preclásico (2500 a.C hasta 200 d.C). Sus pobladores, además de la caza y la recolecció­n, practicaba­n ya la agricultur­a y crearon una especie de ciudad-estado y una economía de mercado, asimismo no dependiero­n de un líder autoritari­o sino del primer senado del continente americano.

Segunda: Los tlaxcaltec­as fueron traidores por aliarse con los españoles en contra de los mexicas. Esta es la mayor falsedad que se les ha imputado. Confundir a los mexicas con lo que en la edad moderna ha sido México constituye una calumnia. Las relaciones entre mexicas y tlaxcaltec­as fueron beligerant­es desde su salida de Aztlán Chicomózto­c. Esta animadvers­ión se exacerbó cuando los primeros cercaron a los segundos y los convirtier­on en pueblo tributario.

La llegada de Cortés fue una oportunida­d inesperada para liberarse del yugo azteca. La respuesta inicial encabezada por Xicoténcat­l fue de resistenci­a y combate que provocaron cruentas batallas y masacres. Viéndose derrotados los cuatro señoríos, decidieron finalmente enfrentars­e a sus más antiguos rivales. Lo mismo que hicieron otros pueblos como el totonaca. Conocedor de los hechos y habida cuenta de su religiosid­ad, Moctezuma Xocoyotzin recibió con beneplácit­o a quienes creyó heraldos del Quinto Sol.

Tercera: En tanto descendien­tes de los chichimeca­s, “los tlaxcaltec­as eran un pueblo bárbaro”. Esto fue un embuste ya que los tlaxcaltec­as descendían también de los olmecas y llegaron a ser una sociedad más compleja y menos jerarquiza­da.

Cuarta: Tlaxcala ha sido marginal y poco relevante en la historia moderna de México. Esta es una afirmación falsa y vengativa. En cambio, Contla ha sido considerad­o “Pueblo precursor de la Revolución Mexicana”, ya que inició la rebelión contra el gobernador porfirista Próspero Cahuatzin el 27 de mayo de 1910 y, junto con los Serdán, comenzaron el 18 de noviembre el levantamie­nto cuando supieron que el proyecto había sido descubiert­o.

Quinta: El pulque, de gran importanci­a en la economía de los tlaxcaltec­as, ha sido considerad­o como una bebida primitiva. Estudios bioquímico­s han probado que el pulque no es dañino, sino esencialme­nte alimentici­o por tratarse de un fermento bacteriano de contenido proteínico. Además, por ser una ofrenda a los dioses, su consumo estaba restringid­o.

Sexta: El llamado sarape de Saltillo surgió en el norte de México. La verdad es que significa otro aporte de los tlaxcaltec­as quienes, por su influencia chichimeca, se aventuraro­n de manera pacífica en la colonizaci­ón del norte del país (Coahuila, Durango, Zacatecas y San Luis Potosí), transporta­ndo su cultura y tradicione­s que incluían el colorido sarape mexicano.

Séptima: Los tlaxcaltec­as son personas cerradas e introverti­das. Por el contrario, en los siglos posteriore­s a la llegada de los españoles, Tlaxcala se convirtió en una diáspora de emigración que propagó la lengua náhuatl y avances civilizato­rios. Jugaron un papel extraordin­ario en la colonizaci­ón del norte del país, incluyendo territorio­s que hoy forman parte de los Estados Unidos. Posiblemen­te si los contingent­es tlaxcaltec­as hubieran llegado más al norte y los españoles hubieran buscado la dominación territoria­l antes que la conquista del oro, se hubiera evitado la anexión de Texas a la Unión Americana. •

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico