Miden entre 0.2 y 0.5 milímetros
EN CASAS HABITACIÓN
• En las casas habitación abundan distintas especies de ácaros. Viven generalmente en los colchones y sillones, así como en plantas y animales. Y cuando la piel de los humanos suelta células muertas en forma de polvito blanco, se las comen.
“Se la pasan muy bien en los colchones, no sólo por las células descamadas que soltamos, sino también por la humedad que trasminamos mientras dormimos. Los humanos estamos permanentemente vaporizando agua y transpirando dióxido de carbono”, comenta Acuña Soto. Cuando los ácaros del polvo, vivos o muertos, son inhalados continua u ocasionalmente, pueden causar asma, que es una reacción o hipersensibilidad a sus antígenos. No se ven a simple vista, pues miden entre 0.2 y
0.5 milímetros.
Otra causa de asma son los polvos asociados al excremento y la orina de las cucarachas, por lo que Acuña Soto recomienda llevar a cabo constantemente una limpieza básica en el hogar: aspirar el polvo, sacudir camas, airear sábanas, no dejar restos de alimentos dentro ni fuera de la casa, y guardar en frascos tapados reservas como la harina y el arroz.
HÁBITAT
• A Demodex folliculorum y Demodex brevis no les gusta vivir a temperaturas muy altas; por eso escogen como su hábitat la piel, una de las partes menos calientes del cuerpo humano (su temperatura es de 24° Celsius; la del hígado y el corazón, de 37° Celsius).