“El niño debe ser educado por y para la libertad”
El próximo martes 28 de junio se cumplen 310 años del natalicio del filósofo, escritor y pedagogo Jean Jacques Rousseau (1712- 1789), quien además fue un apasionado ajedrecista. Según sus Confesiones, a un amigo, “Se le ocurrió proponerme el aprendizaje del juego del ajedrez que él dominaba… heme aquí loco por los escaques. Compré un tablero, me encerré en mi habitación y pasé noches y días queriendo aprender de memoria todas las partidas”. En pedagogía propuso cuatro principios básicos: “El niño debe ser educado por y para la libertad. Debe seguir su propia maduración. El sentimiento debe prevalecer sobre la inteligencia. La formación del juicio es más importante que el saber”. En 1762 publicó El contrato social, obra fundamental del pensamiento político de esa época. Sobre la libertad dijo: “Es verdaderamente libre aquel que solamente desea aquello que es capaz de realizar y hace lo que le gusta…”. Y en torno a lo bello opinó: “Si quitamos de los corazones el amor a lo bello, quitamos todo el encanto de vivir”. Es interesante conocer su legado. •