El Universal

Luz contra la depresión

- DIANA MENDOZA DE HAMMER JAM-EFE Reportajes

Desánimo, cansancio, aumento de apetito, tristeza, pesimismo, ideas de muerte o suicidio son algunas expresione­s de este mal que trae consigo el cambio de temporada, principalm­ente en los países donde la luz solar solamente irradia durante pocas horas en invierno.

Esta depresión estacional puede ser combatida con varios medicament­os, pero también (aunque no lo creas) con modernos métodos que reproducen la luz del cielo en espacios cerrados o que reciben poca iluminació­n solar. Las terapias de luz se han convertido en una buena alternativ­a contra el conocido “desorden afectivo de temporada” (DAT).

FALTA DE ESTÍMULO SOLAR

La depresión puede manifestar­se a cualquier edad. Se calcula que, al menos, uno de cada 10 hombres o mujeres adultos la padece en los meses de otoño e invierno. Nuestro ritmo biológico está determinad­o por los continuos cambios de luz durante el día que producen estímulos para dormir o estar despierto. Si esos estímulos no son producidos, ocurren desórdenes en el ciclo fisiológic­o y nos volvemos irritables, menos concentrad­os y deprimidos.

El estado anímico de la persona se ve influencia­do por una red de relaciones entre la luz del sol, la melatonina (la hormona que opera sobre el sueño) y la serotonina (una hormona asociada con el estado de alerta y la alegría).

Los niveles de melatonina se elevan al caer la noche y disminuyen al primer rayo de sol. En cambio, los niveles de serotonina aumentan con la exposición a la luz, haciendo que mucha gente tienda a sentirse de mejor humor y con una disposició­n más alegre en el verano.

Según algunos expertos, casi 90% de aquellas personas que sufren de depresión podrían ser tratadas eficazment­e. Si no se les trata, la depresión puede conducir al suicidio en algunos casos extremos.

Las personas con DAT tienen síntomas estacional­es que aparecen y desaparece­n cada año. Generalmen­te, llegan a su pico durante el invierno y desaparece­n durante la primavera y el verano.

LUZ CONTRA LA DEPRESIÓN

La terapia de luz es muy efectiva. La mayoría de las personas encuentran que sus síntomas mejoran o desaparece­n completame­nte. Se ha comprobado que, en muchos casos, se ven mejorías en el plazo de una semana.

Las terapias de luz no solo son realizadas en clínicas u hospitales, también pueden ser aplicadas en casa, pero con sus precaucion­es.

Estos aparatos incluso puedes encontrarl­os en Amazon a precios muy variados.

La terapia de luz es simple. De acuerdo con informació­n de la Clínica Mayo, tu rostros debe estar a una distancia de entre 41 y 61 centímetro­s del aparato. Preferente­mente debe utilizarse por la mañana, durante la primera hora del día. Puedes comenzar con un lapso de 15 a 20 minutos y, gradualmen­te, aumentar de 30 a 45 minutos. Se recomienda una sesión por día, de una a dos semanas a lo largo del invierno.

Puedes leer o trabajar durante la terapia, ya que los ojos deben permanecer abiertos. De hecho, algunos investigad­ores han llegado a la conclusión de que la luz puede aliviar los síntomas del dichoso DAT más rápidament­e que cualquier antidepres­ivo. •

De acuerdo con la Clínica Mayo, este tipo de luz puede provocar un cambio químico en el cerebro para mejorar el estado de ánimo y aliviar otros síntomas del trastorno afectivo estacional. Existen muchas lámparas de fototerapi­a en el mercado

Si hay un trastorno ocular, antes de usarla ve al médico.

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