Cepal prevé desaceleración profunda
La región crecerá menos que en la década perdida, dice; para México espera una expansión de 1.1%
Este año se acentuará la desaceleración en la región, lo que provocará que de 2014 a 2023 registre un menor crecimiento que en la llamada década perdida (1980-1989), advirtió la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
En el análisis Balance Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe 2022, la institución expuso que “luego de crecer 3.7% en 2022, se profundizará la desaceleración con un crecimiento de 1.3% en 2023, en una coyuntura sujeta a importantes restricciones tanto externas como internas”.
El crecimiento promedio que prevé la Cepal para el periodo 2014-2023 en la región es de 0.9%, lo que significa que será la tasa más baja respecto al nivel de 2% de la década perdida.
Para este año espera una expansión económica en México de 1.1%, mientras que para Brasil la estimación es de 0.9%; Argentina, 1%; Cuba, 1.5%; El Salvador, 1.5%, y Colombia, 1.5%.
La Cepal afirmó que en el ámbito internacional se espera una disminución en los precios de los productos básicos, que son lo que más exportan los países, mientras que en la parte interna afectarán las restricciones fiscales y monetarias.
“Los países de la región se verán nuevamente enfrentados a un contexto internacional desfavorable, en el que se espera una mayor desaceleración tanto del crecimiento como del comercio mundial y precios de productos básicos más bajos que en 2022, que afectarán negativamente los términos de intercambio de los países exportadores de materias primas”, expuso.
“En el frente interno, los países de la región enfrentarán nuevamente en 2023 un espacio limitado para la política macroeconómica, tanto fiscal como monetaria”, indicó la Cepal.
Si bien se prevé que en 2023 este proceso llegue a su fin, en la medida que se vayan anclando las expectativas de inflación en los países, los efectos de la política restrictiva en el consumo privado y la inversión se harán sentir con más fuerza dados los rezagos con que actúa la política monetaria, señaló.
En el caso del mercado laboral, preocupa el aumento de los niveles de informalidad en 2022, así como que esa tendencia se mantenga durante el año en curso, agregó.
“La evolución del mercado laboral en América Latina y el Caribe estará condicionada en gran medida por un contexto macroeconómico muy complejo”, advirtió la comisión.
“La desaceleración de la actividad económica mundial, crecientes presiones inflacionarias, mayor volatilidad cambiaria y menos espacio para impulsar políticas expansivas hacen prever una nueva desaceleración del PIB de la región en 2023”.
Otro problema es que los niveles de deuda pública permanecen altos para muchos países de la región y, en medio de una alta demanda de gasto, es necesario aplicar acciones que aumenten la recaudación y una mejor política de redistribución, señaló la comisión. •