LA PAZ
LAPLAYAMÁSBONITA La Paz es como su nombre: un sitio muy tranquilo. Puedes caminar la ciudad o rentar bicis para recorrerla. Pero ya que estás aquí, debes ir a uno de los lugares más bonitos que he visto en mi vida: la isla Espíritu Santo. Se trata de un pedacito de la belleza del mar de Cortés, de un intenso azul turquesa, donde lo más común es contratar un recorrido en el que puedes practicar esnórquel o buceo y ver todo tipo de peces, aves y arrecifes de coral. Otro punto obligado y de una belleza asombrosa es Balandra. Es una playa virgen, sin hoteles ni restaurantes, a 25 kilómetros de La Paz, que no tiene olas y de profundidad muy baja, como si estuvieras en una alberca o una laguna enormes. Aunque hayas ido a mil playas, te prometo que no se parece a ninguna. De ahí sigue el recorrido y detente en Pichilingue para comer almejas chocolatas en la playa, o de regreso en La Paz, mariscos y pescados locales en el Bismarkcito. Si quieres algo más formal y con vista al malecón, cena en Oliva al Mare, dentro del hotel Posada de las Flores.
NO PUEDES IR A LA PAZ Y NO IR A LAS PLAYAS DE LOS ALREDEDORES