MARTE EN LATIERRA
A directores como Gareth Edwards o Ridley Scott les bastó mirar este impresionante desierto de piedra en la frontera sur de Jordania para tomarlo como locación de sus películas ambientadas en el espacio exterior. No necesitaron mucho más que poner la cámara frente al paisaje y decir ¡acción!
Y es que podríamos decir que en ningún otro hay vistas iguales. Es uno de esos sitios en donde el tiempo se detiene y hasta podrías sentir que estás en otro planeta. En pocos lugares se puede respirar la paz del desierto de Wadi Rum.
Lo mejor para recorrer este lugar también conocido como Valle de la Luna es ir en un jeep privado serpenteando las dunas. El recorrido te tomará unas cuatro horas y podrás ver puntos importantes como el puente de piedra de Burdah, el más alto de Wadi Rum, y los Siete Pilares de la Sabiduría. Aquí la naturaleza es el atractivo. Como la geología, el agua y el paso del tiempo ha construido todo un espectáculo que también puede disfrutarse en un recorrido guiado sobre un camello o realizando actividades de aventura como escalar. Durante el día debes acercarte a lugares como el puente de roca de Umm Fruth, el cañón de Khazali o junto al manantial de Al-Shallaleh, donde se han encontrado inscripciones en idioma nabateo y pinturas rupestres.
Pero aquí la noche es de los momentos más emocionantes. Podrás descansar bajo una jaima, una tienda tradicional de cuero, en medio del desierto, y apreciar la inmensidad del cielo estrellado ante una fogata, mientras se escucha la música, los cánticos árabes y las historias milenarias. Hay diferentes alojamientos y glampings, con servicios completos donde no te hará falta nada. Wadi Rum Night Luxury Camp es una de las opciones más recomendables.