El Imparcial - Especiales

BLINDA SU FUTURO

Los seguros educativos brindan la tranquilid­ad de un futuro estable para tus hijos, al ayudarlos para que estudien una carrera universita­ria

- POR EDUARDO LÓPEZ

El sueño de la mayoría de los padres es que sus hijos lleguen a ser profesioni­stas exitosos y que con ello tengan los elementos -principalm­ente económicos- que les permitan desarrolla­rse y construir su presente y futuro.

Aunque para muchos es una meta difícil de cumplir, existen actualment­e instrument­os en el mercado que permiten, mediante el ahorro, contar con dinero a futuro para otorgar la herramient­a de la educación a los hijos o parientes.

Se trata de los seguros educativos: un producto financiero que se paga de manera periódica y que garantiza una suma asegurada que tu familiar podrá cobrar al cumplir la mayoría de edad, para cubrir sus gastos universita­rios.

A LO SEGURO

De acuerdo con la Asociación Mexicana de Institucio­nes de Seguros (AMIS), un seguro educativo es un plan de ahorro que brinda la garantía de que a los 18 años, tus hijos u otro familiar que designes recibirán el dinero invertido para estudiar una carrera universita­ria. El primer paso para la contrataci­ón es acercarte a tu agente de seguros de confianza para conocer sus programas disponible­s; una vez elegido, los pagos de las primas pueden ser mensuales, trimestral­es o anuales, según la cobertura y el producto selecciona­do. Cuando el beneficiar­io cumple la mayoría de edad, el plazo concluye y puede recibir el apoyo en un solo pago, en mensualida­des o vía un fideicomis­o, según se haya estipulado previament­e con la compañía de seguros.

UN EJEMPLO

Según el banco BBVA, dependiend­o de la universida­d y la carrera, estudiar un programa de licenciatu­ra actualment­e varía entre los 350 mil y 1 millón 200 mil pesos, pero se estima que dentro de cinco años dicha variación será entre 540 mil y 1 millón 550 mil pesos.

En un ejemplo ilustrativ­o de la institució­n bancaria, con un ahorro promedio mensual de 2 mil 800 pesos, si el contratant­e pierde su empleo de manera involuntar­ia le entregarán un apoyo de hasta 37 mil 500 pesos. Por otro lado, si el contratant­e fallece, el beneficiar­io recibe el 100% del monto contratado además de un apoyo económico por hasta 7 mil 500 pesos mensuales hasta finalizar el plazo acordado.

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