DE CLASE MUNDIAL
Para orgullo de propios y extraños, la UABC es la única universidad en el mundo que cuenta con un concurso de vinos.
Acabamos de pasar la edición XXVII con un sonado éxito, al analizar y calificar cerca de 300 marcas de vino no sólo mexicano, sino además de diversos países productores.
Titánica labor encabezada por el rector de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), Daniel Octavio Valdez Delgadillo; la vicerrectora, Mónica Lacavex Berumen; la directora de la Escuela de Enología, Norma Angélica Baylón Cisneros, así como Eduardo Dueñas y un sinfín de personas con el comedido de hacer este magno evento un ejemplo a nivel mundial. Estuvieron como jueces personalidades del mundo del vino, productores, sommeliers e inclusive, visitándonos desde la Madre Patria la experta Piedad Fernández de Badajoz.
También fueron organizadores Víctor Torres Alegre, juez Técnico del concurso; Eduardo Martínez Palomera, Pedro Mendívil, Juan Carlos Eguiluz, jueces productores de Temécula Javier Flores, Jon McPherson y Jim Hart. Asimismo, Luis Fernando Otero, presidente de la Academia Mexicana de Vino; Fernando Pérez Castro, presidente de Provino y propietario de vinícolas Lomita y Carrodilla; Vittorio Novello, observador Internacional de la Organización Internacional del Vino OIV, entre muchas otras personalidades.
POR LA EXCELENCIA
Tener la gran responsabilidad de ser juez de un esmerado producto del esfuerzo de otros es algo de mucha trascendencia: la mente debe estar en blanco, los sentidos calibrados y en lo humanamente posible, la respuesta mucho más allá de las preferencias personales.
El vino por el vino debe ser calificado en su estructura organoléptica: si tiene algún defecto, y si lo tiene a qué se debe; tiene virtudes, ¿cuáles? ¿Fue hecho de una manera correcta? Inclusive que ese vino no es de nuestras preferencias.
Ahí reside el alto grado de dificultad, imparcialidad y responsabilidad: para catar, hay que dejar fluir nuestras primeras sensaciones para no contaminar el juicio final; el nivel de concentración debe de ser muy alto y usualmente, agotador. Hubo interesantes talleres del VIII Coloquio del Vino, Cultura, Ciencia y Economía (Cietvo); también se contó con la presencia de Gabriel Padilla Maya, director General del Consejo Mexicano Vitivinícola, quien mencionó que posicionarán al Cietvo como el concurso que represente a México a nivel mundial. Volvimos con una gran satisfacción de haber participado en esta importante labor; nos queda reconocer el gran esfuerzo que hace la UABC, cuyos resultados ya trascienden allende las fronteras y con ello nuestra mexicanidad, llevando un mensaje en el vino.