Los encantadores Rosé Vinos
En los principios de la vinificación, los hollejos no estaban mucho tiempo en contacto con el jugo; personas lo extraían del fruto de la parra simplemente caminando sobre los racimos en un gran contenedor, con pies y piernas desnudos. Anteriormente, nos habíamos quedado en la partición entre vino tinto, blanco, amén del espumoso, pero no el rosado. No es que no existiera, no se le había prestado mucha atención.
Aunque proviene históricamente desde probablemente ocho mil años, muchos factores fueron cambiando las preferencias. Actualmente, el vino rosado va a la alza y muchos son los países que lo están produciendo y el público que lo está demandando es cada vez más.
El vino se produce del jugo de la uva, si no, esto no es vino, es un fermentado. En la manera de hacer vino rosado existen varias modalidades, por mencionar algunas: cuando existe una metodología de maceración se entiende que estos elementos pasarán juntos algunas horas, tal vez 48, para extraer sin llegar al vino tinto, los colores y asimismo los sabores de los frutos.
El método saignée -del verbo francés sangrarquiere decir que esta metodología nos dará un proceso como si el producto final fuese a ser vino tinto, es decir, las pieles y el jugo se dejan macerar, pero al cabo de un tiempo que decide el enólogo, se sangra esta porción y se tienen dos tipos de vino: el que escapó por
El vino data de varios miles de años, y en su devenir han existido muchos estilos de vinificación. El vino rosado es quizá el primer estilo del que se haya hecho, después todo, consiste en el tiempo que la piel de las uvas son puestas en contacto con el jugo.
medio del sangrado, con tintes color salmón o naranja. Lo demás queda para continuar la maceración y su posterior fermentado hacia vino tinto con caldo mucho más concentrados de antocianinas.
También existe en la región de Champagne un distintivo de Blend, que consiste en mezclar vino tinto con vino blanco, que en otros países las reglas de DOC no se los permite, pero ahí sí. Muchas regiones, en especial Francia, se jactan de tener los mejores vinos rosados que por su vinificación breve y el método de maceración también fugaz, logran retener acidez viva, notas frutales y florales sumamente frescas y alegres. Languedoc-Roussillon es la región que más produce rosado en Francia, luego hay otras regiones como Provincia y Loire, por mencionar algunos lugares ya que es un vino muy común para consumo inmediato. Los encontramos en Italia, Australia, España y por supuesto en Estados Unidos, amén de muchas otras partes del mundo... inclusive Guadalupe de Ures, para mi grata sorpresa y orgullo. Encontré este rosado de la vinícola San Jerónimo, propiedad de Francisco Salazar Giottoninni, quien es un gran apasionado