Probarlos es amarlos
Cuando pienso en queso, me pregunto: ¿por qué será que me gusta tanto? Imagínense con un tenedor dipeando en un queso fundido… cremoso, perfumado, grasoso.
La experiencia que nuestro paladar vive es inexplicable, pero maravillosa... Es como si algo acariciara nuestro paladar de forma muy amorosa, como la mamá cuando nos hace piojito; en un segundo nos olvidamos de todo y nos enfocamos en esa única experiencia gastronómica que se va derritiendo, y que en automático nos lleva a planear los siguientes bocados.
Hay infinitas variedades, dependiendo de factores como la forma en la cual vienen elaborados, origen o tipo de añejamiento; eso nos ofrece una variedad de sabores que seducen hasta a la persona más exigente: no hay pretextos para decir que no te gusta. El queso es el producto príncipe de los lácteos, con muchísimas propiedades y beneficios saludables de infinitas variedades para elegir a nivel mundial, hechas de las maneras más diferentes con diversas tipologías de leche, y con consecuente diferencia de textura en el producto final.
Lo que realmente diferencia los quesos y marca más las características es el proceso de maduración, ya que es en esa etapa cuando el queso se desarrolla y genera su "identidad" final.
Desde el punto de vista personal, considero que no hay quesos malos: sólo hay diferentes tipos de éstos, y nuestro gusto personal realmente es el juez; así se diferencian por materia prima.
QUESOS CON LECHE DE OVEJA
Son más cremosos y por lo general aromáticos, más grasosos y por el tipo de leche, lleva más vitaminas y beneficios para el sistema inmunológico y nervioso.
QUESOS CON LECHE DE CABRA
Cremosos, blandos y con olores y sabores más marcados y definidos; se recomiendan en las dietas bajas en potasio, por su naturaleza ácida y los ácidos grasos que contienen.
QUESOS CON LECHE DE VACA
Los más comunes, con sabor más suave y menos grasa porque es común utilizar leche descremada; esto también genera quesos con menos sabor.
QUESOS CON LECHE DE BÚFALA
Esta leche tiene un sabor muy peculiar, con levemente dulce y de color muy blanco.