Manzanares, dos orejas
Sevilla, España, (EFE).- El diestro alicantino José María Manzanares cortó dos orejas a un toro de Núñez del Cuvillo de excelente clase, aunque a falta de una mayor apuesta, se quedó a mitad de camino de la soñada salida a hombros por la Puerta del Príncipe en la corrida de la Feria de Abril celebrada ayer en la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, al sur de España.
Apenas un paso más, corto pero decidido y decisivo, le faltó a José María Manzanares para cortarle al quinto toro de la tarde la oreja que le faltaba para avalar su salida a hombros la Puerta del Príncipe, el umbral soñado por todos los toreros y que él mismo ya ha cruzado así en varias ocasiones.
Porque a esas alturas de la tarde ya tenía Manzanares, en frase hecha, abierta una hoja del pórtico de la gloria del toreo después de cortarle las dos orejas, tras una generosa petición popular, al sobresaliente segundo toro de la buena corrida de Núñez del Cuvillo.
Alejandro Talavante también paseó una oreja del tercero, otro ejemplar notable de Cuvillo, que se empleó con calidad siguiendo los engaños. La faena tuvo una rotunda tanda de naturales en su ecuador, en la que el torero se entregó y se “rompió” tanto como merecía el colaborador “enemigo”.
A Sebastián Castellasin le tocó un lote desigual, sin opciones.
Se lidiaron toros de Núñez del Cuvillo, de pareja presentación. Salvo el sexto, que se defendió con mal estilo, el resto dio buen juego.
Sebastián Castella, silencio tras aviso y ovación tras aviso; José María Manzanares, dos orejas y ovación; y Alejandro Talavante, oreja y silencio tras aviso.
Noveno festejo de abono de la feria. Lleno.