Jefe Tribal cumplió con los pronósticos
Roman Reigns derrotó a Daniel Bryan y retuvo el Campeonato Universal, ahora la siguiente parada es Wrestlemania 37, donde defenderá el oro en contra de Edge, ganador del Royal Rumble.
Las acciones de la contienda estelar se dieron bajo la mirada y vigilancia de Edge, quien buscó que en todo momento se mantuviera la legalidad en las acciones, sobre todo a sabiendas de que Jey Uso siempre aparece para ayudar a su primo Reigns.
El Jefe Tribal comenzó dominador en el encordado, hizo gala de sus mejores movimientos, pero sobre todo de la diferencia de estatura y tonelaje, respecto a su rival.
El líder del “movimiento del sí” supo sufrir, acostumbrado a ser el underdog en sus batallas, resistió la mayoría de los castigos y en algunos momentos tuvo oportunidad de brillar y dominar.
Uno de los momentos fuertes fue cuando el árbitro terminó lastimado y fuera del encordado. Reigns hizo una lanza a Bryan y Edge subió al ring para realizar el conteo que solamente se quedó en dos palmadas.
Jey Uso llegó en la recta final de la contienda, con un par de super kicks dejó fuera de combate a Edge y a Daniel Bryan.
La locura del retador lo llevó a intentar golpear a Reigns con la silla, no lo hizo. Edge recibió un nuevo sillazo. Daniel Bryan logró aplicar de nuevo su llave sobre el “Jefe Tribal” y cuando parecía que se rendiría, la “Superestrella categoría R” se recuperó y golpeó a Bryan. Reigns se incorporó y llevó al conteo de tres a su rival. El cinturón se quedó con el Jefe Tribal.