AMÉRICA AVANZA DE PANZAZO Y LEÓN FUE ELIMINADO POR EL TORONTO
OLIMPIA RECURRE A LA DUREZA Y CHUCHO LÓPEZ SALE CON FRACTURA; AHORA SIGUE EL CLÁSICO JOVEN
Olimpia le recordó Santiago Solari lo sucio que en ocasiones se juega en el área. A Sebastián Córdova le pisaron la espalda, a Nicolás Benedetti le cabecearon en la nuca y a Chucho López lo fracturó Yustin Arboleda. Tantos golpes provocaron que América jugara temeroso y perdiera en casa 1-0. El nerviosismo estuvo hasta el final, Solari experimentó su noche más complicada. El Aztecazo se dio, pero no contó. América avanzó a cuartos de final gracias a su triunfo de 2-1 en Honduras. Para su fortuna, la pesadilla quedó atrás y regresarán ahora a la Liga MX.
Olimpia llegó con desventaja y fuera de sentirse eliminados, los Melenudos hasta mostraron mejores cosas que en Tegucigalpa.
Algo pasó en el vuelo. Los hondureños se transformaron. Hubo golpes, incluso Maylor Nuñez pisó la espalda a Sebastián Córdova sin ser sancionado. Increíble.
El equipo catracho impuso respeto. América pensó que Olimpia iba a venir entregado, pero fue todo lo contrario. Los hondureños se multiplicaron en el campo.
La presión de los albos desconcertó a las Águilas. Yustin Arboleda estrelló un balón en el poste. El colombiano naturalizado hondureño estaba en fuera de lugar, pero de haber entrado el balón, el gol hubiera contado, porque el árbitro no notó la posición adelantada.
En la continuación de esa jugada, Michaell Chirinos disparó, pidió una mano de Federico Viñas, pero no hubo infracción.
Fueron segundos de nerviosismo en el área azulcrema. Guillermo Ochoa tuvo excesivo trabajo. El portero americanista falló en una de las jugadas que intervino, Memo dejó el balón suelto, pero Bruno Valdez, encarrerado, llegó a patearlo a tiro de esquina.
Santiago Solari también quedó pasmado. El Indiecito jugó con Córdova y Álvaro Fidalgo, pero jugadores como Chucho López y Leo Suárez estuvieron intermitentes.
Arboleda con sus 1.91 metros de estatura fue un peligro constante. Nadie lo supo marcar.
El huracán catracho arremetió con fuerza, pero no provocó daños.
Tras la tormenta hubo un lapso de calma, luego fue turno del contraataque mexicano. Federico Viñas levitó en el área y con la cabeza estrelló lastimosamente un balón en el poste.
Los ataques amarillos crecieron de manera importante. Córdova y Leo Suárez tuvieron más contacto con el balón y eso provocó que Edrick Menjívar entrara en acción.
Olimpia fue intenso. Nunca le tuvo temor al América o al estadio Azteca. Jerry Bengston en 2013 participó en el segundo Aztecazo de la historia. Honduras venció 2-1 a México y provocó la salida de José Manuel de la Torre. El primer tanto fue de Jerry.
El escenario era el mismo, Bengston supo que era posible tumbar las quinielas.
La batalla se detuvo. América regresó desconcertado, sobre todo la zaga. Sebastián Cáceres dejó centrar Yustin Arboleda y Jerry Bengston entró detrás de Burno Valdez. El resultado fue el tanto catracho. Memo Ochoa no pudo hacer nada.
La tensión creció. Olimpia no estaba lejos de la hazaña. Los roces aumentaron y eso derivó en la lesión de Chucho López. Arboleda lo trabó por detrás y le provocó seguramente una fractura. Falta conocer el reporte médico.
Henry Bejarano vio la acción en primera fila, pero no le sacó la tarjeta roja a Yustin.
El colombiano fue amonestado y enseguida Pedro Troglio lo sacó del campo. Solari reaccionó rápido y metió a Roger Martínez y después a Nicolás Benedetti.
Olimpia supo que era su momento para apretar. Memo Ochoa también sufrió la dureza de los hondureños. El portero azulcrema se tardó en despejar, Bengston lo estorbó, pero el pie izquierdo de Guillermo terminó en la espinillera del catracho. Santiago reclamó la acción desde la banca. El juego retomó su ritmo, Santiago Naveda sacó un proyectil de lejos, pero el Caracol Menjívar lo desvió a tiro de esquina. Las patadas siguieron. Solari decidió darle fuerza a su equipo con Pedro Aquino. El peruano entró a poner orden.
Los golpes no acabaron. Elvin Casildo le cabeceó la nuca a Nicolás Benedetti. La jugada fue legal, pero con demasiada fuerza. El Poeta se quedó unos segundos en el pasto con los ojos cerrados.
El susto pasó y sólo quedó esperar el final del juego. Olimpia apretó todo el tiempo. Los nervios fueron muchos, sin embargo, no pudieron marcar otro gol.
América está del otro lado, pero cómo le costó. Ahora a trabajar y entrenar pues este fin de semana se medirán a Cruz Azul en una edición más del Clásico Joven.