QUEDÓ EN UN SUSTO
Rusia logró este miércoles sofocar con muchas dificultades la rebelión finlandesa (0-1) merced a un gran gol del zurdo Alexei Miranchuk al borde del descanso. Los finlandeses vendieron cara su piel y tuvieron ocasiones para empatar, pero fueron finalmente los eslavos los que se llevaron el gato al agua y tres puntos vitales para sus opciones de clasificación para los octavos de final.
Los rusos se recuperaron así de la dura derrota de la primera jornada ante Bélgica (3-0), mientras los finlandeses aún pueden seguir soñando con llegar a los cruces en su primera Eurocopa. Los finlandeses metieron el miedo en el cuerpo a la afición local con un gol nada más arrancar el partido por medio de Pohjanpalo, pero el árbitro anuló el tanto por un ajustado fuera de juego. A partir de ahí comenzó el asedio ruso. Ozdóev tuvo en sus botas el primer gol tras una buena jugada colectiva, pero su disparo franco dentro del área salió muy por encima del larguero. Poco después, de nuevo a pase de Miranchuk, el gigantón Dzyuba disparó colocado al poste, pero estaba en posición antireglamentaria.
El defensor Mario Fernandes, que había percutido varias veces por su banda y es un hombre clave en el esquema del conjunto ruso, tuvo que ser sustituido tras caer de espalda en un remate de cabeza y trasladado a un centro sanitario.
Pukki, la gran amenaza finlandesa, dispuso de la mejor ocasión de su equipo a la media hora. Tras una magnífica combinación, el balón le llegó al borde del área grande, pero disparó mal.
En la escuadra rusa, todas las acciones buscaban a Dzyuba, pero el delantero del Zenit estaba muy vigilado por las torres visitantes. Sólo una jugada individual podía derribar la muralla finlandesa. Al borde del descanso, Miranchuk recibió la pelota al borde del área, hizo una pared con Dzyuba y, tras recortar a un defensa, colocó el balón sutilmente lejos del alcance del portero. Un golazo que acabaría siendo decisivo.
Los finlandeses salieron con todo en la segunda parte, sin embargo, sus esfuerzos no redituaron y firmaron su primera derrota.
Mario Fernandes fue examinado en el hospital y se comprobó que su columna vertebral no está afectada.