Qatar, rebasado en el primer día
EN EL ARRANQUE DE LA COPA DEL MUNDO, LOS AFICIONADOS SUFRIERON PARA INGRESAR AL FAN FEST
Doha.- Ayer Qatar no sólo perdió en la cancha contra la selección de Ecuador, sino que también su presentación como país anfitrión de la Copa del Mundo se vio opacada. No estuvo a la altura de una afición que acudió en oleadas y, en general, bajo un buen comportamiento.
El acceso para el recinto Al Bayt Stadium representó un reto para la afición y las calles aledañas no fueron suficientes para que fluyeran los mares de los 60 mil aficionados que inundaron el inmueble, principalmente provenientes de la estación del Metro Lusail QNB y que intentaron llegar en autobús.
A 48 kilómetros de ahí, en el FIFA Fan Fest instalado en Al Bidda Park, en la zona de Al Corniche, el evento se vio rebasado por los miles de aficionados que se reunieron para vivir la inauguración desde este punto. De acuerdo con algunos mexicanos que estuvieron ahí, desde tres horas antes el acceso se cerró debido a la gran cantidad de aficionados que llegaron.
Los organizadores implementaron un eficiente cordón policial que impedía el paso. La afición de muchas naciones, evidentemente frustrada, se retiró en general sin problemas, aunque hubo algunos intentos de saltar las vallas. Por altavoces, los policías informaban a los aficionados que el FIFA Fan Fest estaba cerrado y que podían asistir a Al Corniche a seguir la fiesta.
La noche, que en Doha cae a las cinco, no fue más fácil para quienes se retiraron del lugar hacia el Metro. La estación Al Corniche, frente al lugar, sólo funciona como salida, y las más cercanas son West Bay Qatar Energy y Al Bidda, a 15 y 30 minutos caminando, respectivamente, pero el tiempo se multiplicó ante la gran cantidad de gente en el lugar.
En West Bay Qatar Energy, una vez estando en la puerta, sólo para entrar el recorrido era de 20 minutos entre las vallas serpenteantes colocadas para controlar a la multitud.
No decae el ánimo, sin embargo; es la magia del Mundial. Pese a la mala experiencia, aficionados de todo el mundo iban gritando porras a sus equipos antes de entrar al Metro y entre algunos comentaban que volverían al día siguiente a intentar entrar. Más temprano y apelando a la suerte. Ya se verá.