El objetivo es acrecentar las ventas
Para San José, el hecho de que Boss haya firmado a dos embajadores no significa necesariamente que la intención sea dar a conocer la marca, más bien es un intento por acrecentar sus ventas, pues el público del tenis es un cliente potencial.
“El hecho de que de que hayan buscado ya tener como un representante de marca puntual, en este caso un par de tenistas, pues sí lo vería un poco como en esta estrategia de seguirse dando a conocer, si es que le hace falta seguirse dando a conocer, porque es una marca ya lo suficientemente conocida. Pero desde otra óptica, en la que se asume que entre los aficionados que van al tenis, puede ser que uno o más de uno de ellos viste algún tipo de prendas Hugo Boss. Tener la presencia de marca en la cancha puede generar una mayor empatía y esto puede incrementar las ventas, sobre todo si es que a estos tenistas les hacen alguna línea especial, digamos, como conmemorativa”, señaló el catedrático.
El acuerdo económico entre ambos tenistas (Fritz y Berrettini) y Hugo Boss se mantiene de forma confidencial, sin embargo, para darnos una idea de lo que cuesta vestir un tenista, el 2022 la Gazzetta dello Sport reveló que Nike pagó 150 millones de euros a Jannik Sinner por vestir la marca por 20 años.
Otro ejemplo de contratos multimillonarios es el que tuvo Roger Federer, también con la marca de la palomita. La relación entre ambos comenzó en 1994 y se prolongó hasta 2018, cuando el suizo decidió cambiar a Uniqlo. Sin embargo, en 2008, cuando se arreglaron por última vez, Nike desembolsó 10 millones de dólares por temporada, lo que fue, en diez años, un total de 100 mdd. A pesar de dicho contrato, Uniqlo apareció para ofrecer el triple (300 mdd por diez años) y fue así que “Su Majestad” dejó a la compañía que lo vistió básicamente toda su carrera.
Tanto Taylor Fritz como Matteo Berrettini son tenistas que históricamente mantienen un bajo perfil, es decir, no se encuentran relacionados con polémicas, para San José esto podría ser un factor por la cual fueron elegidos por Hugo Boss, sin embargo, esto no es definitivo. “Depende mucho de las características de la marca (la elección de un embajador). En su momento John Mcenroe era el niño malcriado del tenis, y cualquiera hubiera dicho oye pues yo no me quiero aliar con él. Era muy polémico, pero al mismo tiempo muy bueno, entonces, si lo pensamos desde ese punto de vista donde una de las cosas que las marcas buscan obviamente es visibilidad, aunque a veces puede llegar a ser un poco arriesgado, lo elegían, aunque hay otras que preferirían un tipo más como Federer, todo depende”, explicó. /