FALTA PLATA PARA LA PLATA

México produce una quinta parte de la plata que se utiliza en el mundo. Pero las inversiones van a la baja desde hace años.

Si México deja de producir plata, el mundo se quedaría sin una quinta parte del metal que utiliza. Aunque el oro es el metal con la mayor participación en el sector minero, al contribuir con 37% del total, es con la plata (con 18%) que el país es líder entre los productores a nivel mundial. Sin embargo, el metal es mexicano, pero la mayoría de las empresas, no. Fresnillo, subsidiaria de Peñoles, es la compañía que lidera la actividad, pero del resto de las 275 empresas extranjeras en la industria, 173 (65%) son canadienses, de acuerdo con Proméxico. Goldcorp, sobre todo con su operación de Peñasquito, en Zacatecas, es la principal. La plata es considerada un metal precioso, aunque se emplea, cada vez más, para uso industrial. En la presentación del World Silver Survey, Johann Wiebe, analista senior de metales de Thomson Reuters, señaló que, si bien la demanda de plata en el mundo cayó 11%, la baja fue compensada por los pedidos del metal en instalaciones de paneles solares en China y Estados Unidos. Casi todo el metal mexicano, 98% de la producción, se exporta al vecino del norte, desde donde ya llega a las diferentes empresas que la utilizan como insumo. Ahora, ante el pronóstico de que la economía internacional muestre una recuperación paulatina, Sergio Almazán, director general de la Cámara Minera de México (Camimex), confía en que el país mantendrá el liderazgo como productor de plata, y que los proyectos en fase de desarrollo y construcción continúen hacia su etapa de producción. “También esperamos aumentar inversiones que permitan concretar ampliaciones y expansiones en los proyectos mineros”, añade. La Camimex tiene en su lista 10 proyectos de producción de plata, con una inversión de 545 millones de dólares. Los principales en puerta son la mina Rey de Plata, de Peñoles, en Guerrero, y la expansión de La Colorada, de Pan American Silver, en Zacatecas. Pero el panorama no luce claro. En 2016, la producción cayó 17% y las inversiones descendieron 20%. Es el cuarto año consecutivo que la inversión en la industria minera cae. Daniel Chávez, presidente de la Camimex, señala que los principales elementos que disuaden la inversión son, sobre todo, fiscales, como “la imposición de nuevos derechos (las regalías), el desmesurado incremento de otros y la falta de certeza jurídica”. Para que lleguen más inversiones, Michael Harvey, consejero de la Cámara de Comercio del Canadá en México (Cancham), aconseja mirar la competitividad fiscal que ofrecen otros países y cambiar las reglas para así atraer a más inversionistas.