Las ventajas y desventajas de los espacios de coworking
El coworking es un fenómeno que llegó para cambiar el panorama no solo del esquema de trabajo de miles de profesionales, sino de toda la industria inmobiliaria. Si bien los espacios de este tipo representan aún una minoría en comparación con las oficinas tradicionales –de acuerdo con el Global Coworking Map, en México, por ejemplo, existen solo 53 inmuebles de trabajo compartido–, poco a poco se están convirtiendo en una opción atractiva para decenas de empleadores. De acuerdo con los resultados de Global Coworking Survey 2017, elaborado por Deskmag, la previsión de aumento de este tipo de espacios para este año es del 22%, alcanzando los 13 mil 800 puntos de coworking alrededor del mundo, con un millón 180 mil miembros. En México, algunas dependencias de gobierno ya han comenzado a implementar programas de espacios compartidos entre sus colaboradores. Pero, ¿qué es lo que ha vuelto a los espacios de coworking tan atractivos? Los beneficios parecen ser múltiples. Según el estudio “La nueva era del coworking”, de la firma global de servicios inmobiliarios JLL, las organizaciones están adoptando el concepto de coworking para aprovechar la innovación incipiente y beneficiarse de la denominada ‘curva de colaboración’. En ese sentido destacan cinco ventajas o aspectos que permiten maximizar el efecto de transformación del coworking:
• Colaboración. El coworking anima a compartir conocimientos, da acceso a nuevas redes y permite a las empresas y a sus empleados aprovechar ideas que normalmente no tendrían a su alcance. • Innovación. El análisis apunta a que cada vez es mayor el número de organizaciones que están utilizando modelos de coworking para acceder a ideas innovadoras y tecnología, así como para colaborar con emprendedores. • Flexibilidad. El coworking puede ayudar a satisfacer la creciente demanda de agilidad y flexibilidad de espacio en las empresas. • Talento. Ante el crecimiento de la tecnología móvil y el cambio en las preferencias de los empleados, el coworking puede ser la opción de las empresas para ofrecer entornos de trabajo adaptados a los nuevos tiempos. •Reducción de costes. Aunque no es la motivación principal del coworking, puede crear la oportunidad de un uso más eficiente del espacio, ayudando a las empresas a disminuir los gastos, sin renunciar a la calidad de su espacio de trabajo.
No obstante, la implementación del coworking también implica algunos desafíos y riesgos para los que las compañías deben estar preparadas: • Seguridad. Especialmente para las empresas que procesan un gran volumen de datos confidenciales, el compartir espacio con organizaciones externas o relajar las normas de uso de los dispositivos personales puede resultar problemático. • Privacidad. Muchas empresas temen la pérdida de propiedad intelectual, ideas u otro tipo de información confidencial con el uso del coworking. • Cultura. Algunas organizaciones introducen el coworking solo de manera selectiva, lo cual puede generar división o resentimiento entre el personal. • Motivación. El coworking impuesto desde arriba de la organización, sin la debida consideración de la experiencia del usuario o del empleado, probablemente no producirá los beneficios que la mayoría busca.
No hay duda de que los espacios de coworking llegaron para quedarse, sin embargo, dependerá de cada organización y de sus objetivos particulares, analizar si se trata de una alternativa que realmente le conviene para desarrollar de la mejor manera sus proyectos.