Cambio en la estrategia para competir en un futuro tecnológico
La esperanza de las aseguradoras por ver un crecimiento acelerado y mayor rentabilidad, se vio aquietada debido al surgimiento de distintas barreras –tanto naturales como artificiales– en 2017, aunque parece haber un optimismo cauteloso respecto a 2018. En lo que va del año, se ha percibido mucha incertidumbre a causa de los temas políticos, las próximas elecciones y la situación con el TLCAN. Sin embargo, el sector asegurador ha venido creciendo y comienza a cruzarse de manera significativa con el mundo de la tecnología (FINTECH). Y aunque el tema tecnológico no deja de ser relevante para el sector, existen otros temas igual de importantes como la nueva ley de seguros, Solvencia 2, la cual lleva casi dos años consolidándose; la penetración del seguro, es decir, los temas relacionados con el seguro obligatorio, catástrofes; y si realmente el seguro está respondiendo a esta problemática social y su intervención para cubrir a las personas. Sin embargo, a pesar de esta situación existen muchas compañías aseguradoras extranjeras que están interesadas en invertir en nuestro país, y otras más ya han realizado importantes consolidaciones, lo cual quiere decir que nos están viendo con una capacidad de crecimiento importante. Por otro lado, en cuanto a desastres naturales existe muy poca penetración de los seguros a casa habitación, y con los sismos de septiembre pasado, quizás había seguros, pero evidentemente los más cubiertos eran los bancos, no las personas. La percepción del público en general es que las compañías de seguros no cumplen y no pagan los siniestros. Es aquí donde la parte tecnológica puede ayudar revertir esta percepción creando herramientas que eviten la entrada a un embudo a la hora de reclamar un seguro. Otro reto a vencer de la mano de la tecnología se encuentra en el servicio al cliente por parte de las aseguradoras para lograr que la gente sienta que tiene un respaldo en la compañía de seguros cuando sufra un siniestro. La tecnología ayudaría a que conozcan mejor los seguros a contratar y que las compañías se encuentren más cerca de sus asegurados. Incluso, de los incentivos que utilizan las propias aseguradoras con sus clientes que prevén el cuidado de ciertas enfermedades. En el mercado ahora ya hay productos en los que, a través de la colocación de ciertos instrumentos en los automóviles, la compañía puede darse cuenta de cómo y dónde se conduce, cómo cuidan su automóvil, y derivado de eso, ir bajando el costo de las primas. Las aseguradoras pueden aprovechar las oportunidades de crecimiento y mejoras operativas si logran superar una serie de obstáculos internos y externos en su camino. Sin embargo, aquellas que conviertan la transformación digital no solo en una prioridad sino en un proceso de mejora continua, serán las que le inyecten energía a sus culturas, además de ver mejoría en su crecimiento y rentabilidad.