El secreto está en los vegetales, el chef Diego Izunza lo cuenta todo.
De un lado íntimo de La Casa Rodavento, un nuevo hotel de siete suites en Valle de Bravo, se encuentra Nuestro, un restaurante de cocina mexiquense que vale la pena visitar en cualquier ruta culinaria del centro del país.
El saber trasladar el sabor de un lugar a un platillo es una tarea compleja, pero, definitivamente, no imposible; lo único que se necesita es curiosidad y una sólida conexión con el entorno. “La cocina de un país es un paisaje puesto en una cazuela. Ésta es la máxima que rige mi cocina”, explica el chef Diego Isunza sobre su trabajo en Nuestro, el restaurante al interior del hotel boutique La Casa Rodavento, en pleno centro de Valle de Bravo. “Tenemos una inmensa variedad de vegetales, hongos, hierbas y especias en el Estado de México, y su cocina es increíble; tiene muchísimos productos y, desafortunadamente, no se le da el crédito que se merece”. La curiosidad de Diego por el paisaje vallesano se traduce en un menú degustación compuesto, en su mayoría, por vegetales y frutas del huerto, maíz nativo y quesos regionales. “Tomo lo que encuentro. Una de las labores que hago es que desarrollo primero las salsas y guarniciones que, para mí, son el protagonista en el plato. Luego integro la proteína más sencilla, buscando que sea neutral. Como chef, encuentro que el reto está en saber cocinar los vegetales”. El menú de Nuestro refresca la oferta de los restaurantes de hotel en este destino, pues ofrece una experiencia de cocina mexiquense única y bien articulada, más allá de los típicos restaurantes de pizza y pasta. “Si vas a un restaurante, no vas únicamente a comer; estás buscando una experiencia, y, de preferencia, probar platillos y alimentos que no conocías”, afirma el chef. La recomendación es visitar Nuestro y darle oportunidad al menú degustación que cambia por temporada ¿El acompañamiento? Déjate sorprender por la coctelería, pues ofrece gratas sorpresas en cada trago.
“LA COCINA DE UN PAÍS ES UN PAISAJE PUESTO EN UNA CAZUELA”. DIEGO ISUNZA, CHEF DE LA CASA RODAVENTO.