GRUPOS FINANCIEROS
Los grupos financieros operan con una carga normativa que los reguladores endurecieron tras la crisis de 2008. Y desde 2014, la reforma financiera incluyó entre sus objetivos mejorar las prácticas bancarias y fortalecer la transparencia hacia los clientes, inversionistas y autoridades. Sin embargo, cuatro años después, estos temas continúan como una cuenta pendiente del sector. En el ranking del IC500, los grupos financieros que transparentan estas políticas son pocos: BBVA Bancomer, Scotiabank, Citibanamex, HSBC, Gentera y Santander, todos por encima de 70 puntos sobre 100. Pero la mayoría de la industria en México no supera el aprobado, y el promedio del sector es de 42.6 puntos. “Pareciera que la regulación se ha enfocado en capitalización y valuación del riesgo, pero no se ha dado la suficiente importancia a la normatividad anticorrupción y de lavado de dinero” dice Enrique Díaz, directivo del Centro de Estudios Espinosa Yglesias. “No tienen que volverse ‘sexys’ para el público inversionista, porque, además, la mayoría no cotiza”, explica. Para Ignacio Cortés, socio de la consultora Ernst & Young, los grupos financieros tienen que mejorar la transparencia de sus políticas de integridad y anticorrupción. Pero la batalla debe centrarse en la implementación de dichas políticas, destaca, y una herramienta para lograrlo son los sistemas de denuncia, que aún tienen camino para mejorar.