TÁCTICAS
1 AMPLIAR LA OFERTA DE NUBE DE POLO A POLO
Existen tres tipos de nubes: públicas, privadas e híbridas. Las públicas tienen información de fácil acceso que puede ver el público general. Una nube privada contiene información restringida, permitida únicamente a usuarios aprobados y el modelo híbrido las combina. En los últimos años, lo que ha abierto la oferta de nube y ha comenzado a inclinar la balanza hacia lo público o híbrido es el tema de costos, pues ser privado cuesta. Un par de ejemplos de nubes híbridas son Dropbox o Google Drive, que ofrecen servicios de alojamiento de archivos, como música o documentos para que puedas acceder y descargarla desde cualquier navegador o dispositivo, en cualquier parte del mundo; sólo basta tener conexión a internet y abrir un perfil de usuario. Para las empresas, adoptar nuevos modelos híbridos puede ser benéfico, ya que ayuda a quitar carga de trabajo de las redes de la organización y mantiene separados los datos sensibles, en privado, y el resto, en almacenamiento público. Una empresa podría usar nube híbrida para retener datos de ventas en privado, pero ejecutar consultas analíticas en la nube pública, por ejemplo.
“LA TRANSICIÓN HACIA LA NUBE HÍBRIDA HA HECHO QUE EMPRESAS MÁS PEQUEÑAS ENTREMOS A LA COMPETENCIA DE CLOUD, PERO TAMBIÉN HA PROVOCADO UNA COMPETENCIA MÁS VORAZ Y CERRADA ENTRE TODOS LOS PARTICIPANTES”. Dheeray Pandey, Nutanix.
2 SEGURIDAD
Federico Da Silva, director de Investigación y Análisis de Gartner, considera que la adopción de lo híbrido refleja un mercado cada vez más avezado tecnológicamente; sin embargo, aún se debe poner especial atención a los elementos de seguridad. “El 79% de los ejecutivos de tecnologías de la información considera que la nube es un impulsor de ingresos, pero esta competencia cada vez más debe ofertar una red bien estructurada donde no sólo se tenga la garantía de la nube como tal, sino un refuerzo en la ciberseguridad”, dice. Mientras tanto, para las firmas que se pelean este mercado, la nube ya es un motor de ingresos. En el primer trimestre de 2019, Amazon, Google y Microsoft dejaron ver que el incremento de los ingresos por la nube va al alza. Azure le generó a Microsoft ingresos por 9,700 millones de dólares, un 22% de crecimiento con respecto al primer trimestre de 2018 e, incluso, fue esta división la que coronó a la firma en el grupo de empresas con un valor de mercado de 1 billón de dólares. Esta misma tendencia se confirmó en AWS. Su división de nube mantuvo el ritmo de crecimiento y reportó un incremento de 41% en ventas. Google Cloud generó un alza de 17% con respecto al primer trimestre de 2018, y con ello, la división se posicionó como una de las más atractivas de la marca. De hecho, la compra más reciente de Alphabet, holding de Google, fue Looker, una plataforma de inteligencia artificial dirigida a negocios en la nube. La transacción por este servicio fue por 2,600 millones de dólares. Sin embargo, para mantenerse en esta batalla las empresas requieren dos estrategias claras: diversificación y precios más competitivos.
3 PLAN DE GUERRA CONSTANTE DIVERSIDAD
Para captar y retener clientes, algunos analistas, como Juan Carlos Minero, director de Estrategias de Inversión de Black Wallstreet Capital México, indican que las empresas deben ofrecer un precio más atractivo por megabyte y deberán empezar a desarrollar también aplicaciones y sistemas abiertos que no requieran que el cliente se “tenga que casar” con un solo proveedor. En el largo plazo, será mejor dar libertad a las empresas que restringir sus servicios e infraestructura. Las tecnológicas que mantengan sistemas rígidos tendrán costos más elevados de operación y menos oportunidades de acercarse a un abanico más amplio de clientes. De hecho, este tipo de características empiezan a ser relevantes de punta a punta. Para Minero, el cloud computing será la “siguiente mina de oro”, pues el negocio de almacenamiento en la nube llegará a un límite dentro de unos cinco años, y para mantener la innovación, será vital que las empresas compitan en precios y valor agregado de las soluciones.
4 PRECIOS COMPETITIVOS
Alejandro Magno decía que la gloria corona las acciones de aquellos que se exponen al peligro y, por ende, todo el tiempo buscaba ser diverso en sus estrategias para conquistar el mundo. Lo mismo sucede con las empresas de tecnología, que tendrán que salir de su zona de confort y territorio conquistado para mantenerse en esta guerra que es más intensa. Pero esta línea de diversidad por el dominio de los datos cada vez hace que choquen más entre ellas y que den paso a nuevos participantes que antes no competían en este mundo de la nube. Google no sólo se ha quedado en el negocio de búsqueda y ha empezado a implementar otras iniciativas para hacer frente a Amazon en el comercio online, aunque no ha tenido mucho éxito. Comenzó en 2013 con Amazon, Apple, Google y Microsoft, que han abierto su operación más allá de sus negocios centrales y si las tácticas en esta guerra de las nubes continúan por la misma tendencia llegará un punto de convergencia entre grandes y pequeños competidores en los próximos cinco años, como lo han predicho Minero o Da Silva. Tal vez por ahora no quede claro quién se ve tomando la bandera de la victoria de cloud, pero los estrategas y analistas apuntan a que será quien mejor diversifique sus armas, saque mayor provecho económico de su ejército de datos y se adelante a las batallas de mejores servicios para los clientes.