VIOLENCIA DE GÉNERO, UN PENDIENTE SIN RESOLVER EN LA CDMX
Aun con las acciones para contener la violencia contra las mujeres, los crímenes siguen ocurriendo. En 2019, los feminicidios aumentaron 58.1%.
Parada en el estrado principal del recinto de Donceles y junto al presidente Andrés Manuel López Obrador, Claudia Sheinbaum rindió protesta a su cargo e hizo una promesa: trabajar como nadie para erradicar la violencia de género y hacer justicia en los casos de feminicidios en la capital del país. Los aplausos estallaron. El compromiso lo hacía la primera jefa de Gobierno electa en la Ciudad de México. Su histórica victoria vino acompañada por un gabinete paritario (15 mujeres y 16 hombres) y el refrendo de que la capital del país seguiría a la vanguardia con una agenda de derechos a favor de ellas.
Y así, llegaron sus primeras acciones: la transformación del Instituto de las Mujeres en Secretaría, la creación de la Fiscalía Especializada en Feminicidios y la incorporación de una red de abogados con perspectiva de género a los ministerios públicos. Pero éstas pronto fueron rebasadas por la realidad y los casos de policías capitalinos señalados por agresiones sexuales contra jóvenes se convirtieron en el combustible para que las mujeres salieran a la calle, con pañuelo verde y diamantina rosa, con una sola exigencia: alto al acoso y la violencia de género. “Nos están matando”, “Ni una más” y “México feminicida” fueron las consignas que se acuñaron, esta última, plasmada con aerosol en el Ángel de la Independencia.
A finales de agosto de 2019, y en respuesta a las marchas sobre Paseo de la Reforma, el gobierno capitalino presentó el Plan de Acciones Inmediatas para Atender la Violencia de Género, que incluye la homologación del botón de auxilio, la instalación de más de 20,000 luminarias, la creación de senderos seguros y el fortalecimiento de los espacios exclusivos en el metro y el Metrobús. Sheinbaum decretó la Alerta de Violencia de Género, con la propuesta para crear un Registro de Agresores Sexuales. En diciembre, los diputados locales avalaron la Ley Olimpia, que sanciona el acoso y la violencia digital, y el banco de ADN, que concentrará información genética de los sentenciados por varios delitos, entre los que están violación, feminicidio y trata de personas. “Las mujeres de nuestra ciudad tienen el anhelo de sentirse más seguras. Estoy de su lado, como mujer y como gobernante”, dijo Sheinbaum ante feministas y legisladoras al presentar el plan.
VIOLENCIA Y ERRORES INSTITUCIONALES
Pero aun con las acciones que lleva a cabo el gobierno de la ciudad, la violencia contra las mujeres no para. Tan sólo el feminicidio aumentó 58.1% en 2019. De acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), en el primer año de gobierno de Sheinbaum se cometieron 68 feminicidios, mientras que 2018 cerró con 43.
Para la ingeniera geofísica María Salguero, quien desde 2015 ha formado el Mapa Nacional de los Feminicidios, la cifra en 2019 llegó a 196 en la CDMX. “Las acciones impulsadas por la jefa de Gobierno no han hecho que bajen los delitos contra mujeres, pues todavía hay ministerios públicos que no clasifican el delito y dejan libre a los feminicidas”, expresa. Entonces, ¿qué ha fallado en las políticas impulsadas por las autoridades capitalinas? Para Fernanda Salazar, politóloga y especialista en igualdad de género, el Plan de Acciones fue improvisado, sólo para contener la presión que, en el momento, ejercieron las feministas, pero considera que no hay una perspectiva amplia de las políticas públicas para enfrentar el problema.
EN LA CDMX SÍ HAY MEDIDAS, PERO NO SABEMOS CUÁL ES EL PLAN ESTRATÉGICO NI LO QUE ESTÁN MIDIENDO.
María de la Luz Estrada, coordinadora del Observatorio Nacional Ciudadano del Feminicidio.