RELANZAMIENTO ECONÓMICO
Las medidas de mitigación en Jalisco empezaron desde que se reportaron los primeros casos de COVID-19 en México. Estas no fueron solo para “aplanar” la curva, sino para minimizar también el impacto económico de la epidemia en la entidad. Ernesto Sánchez Proal, titular de la Secretaría de Desarrollo Económico de Jalisco (Sedeco), señala que las pérdidas en la economía son por 140 millones de pesos diarios, lo que significa perder 4,200 mdp en solo un mes o 5.8 millones por hora. “Sería el peor escenario y lo veríamos en el pico de la crisis”, asegura.
Como primera medida diseñaron un plan emergente para apoyar a empresas, trabajadores informales y personas con autoempleo, al que se destinaron 1,000 millones de pesos, provenientes del presupuesto. Sánchez Proal explica que se reacomodaron recursos de eventos, ferias internacionales o viajes que no se harán por la emergencia.
También están reservando recursos para un plan de reactivación económica para que, una vez que pase esta crisis, se pueda impulsar la industria y “despegar” con mucha fuerza.
El funcionario es positivo al ver un último trimestre de 2020 con un “efecto rebote”. “Estamos concentrados en manejar la emergencia económica sin desatender lo que será la fase de relanzamiento”, asegura.