EVITAR LAS REGLAS A MODO
El consejero presidente señala que el INE está por encima de los actores públicos, pues son los guardianes del proceso electoral y de la Constitución.
Entrevista con Lorenzo Córdova, presidente del órgano electoral.
EN MÉXICO, EL VOTO YA NO SOLAMENTE SIRVE PARA ELEGIR A NUESTROS GOBERNANTES, SINO TAMBIÉN [ES] UNA ESPECIE DE RENDICIÓN DE CUENTAS DE LA CIUDADANÍA.
Lorenzo Córdova, consejero presidente del INE.
Dice el dicho que Roma no se hizo en un día, y para el consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova, se debe recordar que la democracia en México tampoco se construyó de un día para otro ni a partir de los deseos de una persona o de una ideología, sino que es producto de una larga evolución y consensos.
Para Córdova, que ha estado al frente del organismo que ha organizado 200 elecciones y hoy prepara la más grande de la historia (más de 21,000 cargos a elegir), la democracia ha sido una construcción colectiva, de distintas visiones de partidos políticos que tuvieron un punto de convergencia, pero advierte que la creciente polarización y la desinformación aunadas a la falta de resultados de los gobiernos democráticamente electos la ponen en riesgo. “Hoy, la democracia no goza de un buen momento. No es un asunto de hoy, de la pandemia, de un proceso electoral; desde hace tiempo venimos arrastrando una serie de promesas incumplidas”, ha advertido el consejero presidente, quien no esconde su preocupación por el clima de polarización que se vive en México y que esto lleve a un posible surgimiento de la intolerancia.
Tampoco pasa desapercibida la advertencia del árbitro electoral de que la desconfianza a la contienda “incluso es alimentada por algunos como estrategia electoral”, pese a que ya fueron desterradas prácticas del pasado, como el llamado “ratón loco”, “carrusel”, “urnas embarazadas” o el hecho de que “los muertos votan”. Según Córdova, el costo de las elecciones obedece, en gran medida, al costo de la desconfianza que hay en las mismas, de ahí que el voto es la herramienta más poderosa para desterrar cualquier duda sobre los resultados. El año 2000 no solo dio paso a la elección más competida de la historia de México
sino a la alternancia, luego de 71 años de hegemonía priista. Actualmente, lo único incierto en una elección son los resultados. “Por ello, una cosa es la polarización y otra cosa es la intolerancia, porque cuando el contraste y la intensidad del debate político es muy alta, uno puede hablar mal del de enfrente, pero siempre reconociendo legitimidad y dignidad como contendiente, como adversario. (...) Cuando hay intolerancia se ve al rival como alguien a quien hay que erradicar”, subrayó Córdova al abrir la Mesa Decisión 2021 de Expansión Política. Esta polarización, advierte, puede tener dos efectos el 6 de junio: alejar a los ciudadanos de las urnas o hacer que participen de manera más decidida, pues hay una gran cantidad de temas sobre la mesa por lo que habrá que pronunciarse con el voto cómo ha sido la gestión de la pandemia o las políticas gubernamentales, pues recuerda que las elecciones intermedias, históricamente en México, han servido a los ciudadanos para castigar o premiar a los gobernantes.
“En México, el voto ya no solamente sirve para elegir a nuestros gobernantes, sino también [es] una especie de rendición de cuentas de la ciudadanía, pues, como pasó en el año 2000 y en 2018, puede ser un voto de castigo o de esperanza”, señala. A medida que han avanzado las campañas, las críticas hacia el organismo y a su persona –desde el Poder Ejecutivo y del partido oficial– se han vuelto tan cotidianas como los señalamientos de que “el INE ha dejado de ser el árbitro y se ha vuelto un jugador en la elección”, a los que Córdova contesta recordando que el INE es el único guardián de las elecciones a través de hacer que se respeten los principios que señala la Constitución y que ninguna de sus decisiones tiene dedicatoria.
EXPANSIÓN: ¿Se está creando una idea de fraude electoral para la elección? LORENZO CÓRDOVA: Hay algunos actores que están queriendo construir una idea de que va a haber un fraude, como pasó en Estados Unidos con el expresidente Donald Trump. No quiero pensar eso, porque sería una profunda irresponsabilidad, es parte de una narrativa que provocó crisis inédita y puso en riesgo la democracia estadounidense.
Hay que identificar y denunciar a quien hoy pueda estar construyendo un discurso para ver si se ofrece utilizar un día después de la elección porque es profundamente irresponsable, peligroso y antidemocrático.
LA DEMOCRACIA EN MÉXICO NO SE CONSTRUYÓ DE UN DÍA PARA OTRO, ES PRODUCTO DE UNA LARGA EVOLUCIÓN.
Lorenzo Córdova, consejero presidente del INE.
E: ¿Hace falta reforma electoral?
LC: Los alemanes dicen que la reforma electoral es una reforma interminable, porque cada dinámica plantea nuevos desafíos. ¿Es urgente una reforma? La respuesta es no. ¿Con las reglas que tenemos podemos conducir una elección compleja como la que se nos viene encima? Sin duda, sí podemos. ¿Se pueden mejorar las reglas? ¡Cómo no! Yo le quitaría mucho de ese barroquismo que vuelve complicada la operación política, y liberaría muchas prohibiciones que están hoy en la norma, pero eso tiene que cumplir dos condiciones: que se haga después de la elección, y no hay que olvidar que las reglas del juego requieren consenso.
E: ¿Existe el escenario para una reforma?
LC: Si una mayoría quiere construir las reglas a su conveniencia, va a crear un problema en el futuro, pero si se hacen reglas respetando esa premisa, de que se procure el más amplio consenso, y sean reglas para fortalecer el sistema democrático, no para tener una involución democrática, podríamos cambiar las reglas, siempre en consenso, como la democracia.