CÓMO COMPRAR UNA VIVIENDA DE LUJO POR 6 MDP
Con un esquema disruptivo, la empresa Kocomo pretende ampliar el número de clientes que pueden acceder a este tipo de inmuebles en México.
Despiertas y ves frente a ti, casi al pie de la cama, la arena blanca y el mar azul de la Riviera Maya. Antes de desayunar, caminas por los 36 metros de bahía que están justo en la puerta de tu casa para luego tomar un baño en una de las recámaras de la vivienda, valuada en 94 millones de pesos. Pero pagaste por ella una octava parte. Esta es la experiencia que Kocomo quiere que vivan los compradores de inmuebles de lujo en los destinos turísticos del país. El concepto es simple: “Es como comprar una casa entre varios amigos”, dice Martin Schrimpff, su fundador. Kocomo escoge una vivienda que cumpla con ciertas características: un precio de más de 500,000 dólares, ubicación en zonas exclusivas, diseño de gran calidad y amenidades de lujo. En su plataforma tiene casas en Tulum, Sayulita, Los Cabos o Puerto Escondido. La compañía pone a la venta estas viviendas para que ocho personas participen en su compra. Cada interesado paga una octava parte del valor total y este es el atractivo de su propuesta. Una buena parte de los inmuebles ronda los 6 millones de pesos por cada fracción. Cuando hay al menos tres personas con intención de compra, la empresa ya firma acuerdos de participación con la dueña del inmueble, se coloca un fideicomiso y se nombra a una compañía de responsabilidad limitada (LLC, por sus siglas en inglés) de la que la persona vendedora se hace propietaria. Quienes adquieren la vivienda deben realizar después pagos mensuales para el mantenimiento. Cada copropietario tiene derecho a ocuparla por seis semanas: tres en temporada alta, dos en media y una en baja. También puede alquilarla. La diferencia con el tradicional tiempo compartido, dice Schrimpff, es que el comprador puede escoger todos los años cuándo usar su vivienda. El modelo, enfocado en operaciones cross border (con compradores de Estados Unidos y Canadá en México), fue probado por la start-up Pacaso, aunque esta se centra en inmuebles a las afueras de las ciudades y Kocomo, en destinos vacacionales. Su propuesta ha interesado a los inversionistas, con los que ha levantado 56 millones de dólares de deuda y equity a través de firmas como ALLVP, Vine Ventures, JAWS, Picus Capital, Fontes-qed, FJ Labs y Clocktower Technology Venture. La empresa lleva nueve meses de operación y en sus primeros cinco ya había comercializado dos propiedades, por lo que tiene una meta ambiciosa: “De acá a 10 años, pensamos en 5,000 viviendas”, asegura Schrimpff.
Para lograrlo, ya tiene los pasos de su plan de expansión. El primero, y del que ya evalúa operaciones, es llegar a Miami con una oferta enfocada en el mercado latinoamericano.