SHA Wellness Clinic
NOS ADENTRAMOS A LOS PROGRAMAS ALIMENTICIOS DE ESTE RECONOCIDO REFUGIO DEL BIENESTAR, UBICADO EN ESPAÑA.
SHA NO ES UN SPA, NI UNA CLÍNICA,
ni un hotel de lujo. La idea de SHA es fungir como un refugio de los excesos de la vida frenética en la que vivimos, para lograr un cambio positivo en las personas que se hospedan. Este espacio nació en 2008 y fue creado por Alfredo Bataller Parietti, como respuesta a una experiencia de salud personal transformadora. La historia corta: al recibir un diagnóstico poco prometedor recurrió a un médico nutricionista que cambió no su dieta, sino el ritmo de su vida. Fue así que SHA se materializó como una una clínica de medicina preventiva y bienestar holístico.
Lo primero que hay que saber es que hospedarse en SHA implica un compromiso de salud con uno mismo. Este es s un lugar para personas que están en busca de una vida saludable y quieren un retiro del estrés y la negatividad. Gracias a una fusión entre las filosofías antiguas y los últimos avances de la medicina occidental, SHA se ha convertido en una clínica de salud preventiva.
EL MÉTODO SHA
El secreto del método SHA 360 es que, además de basarse en los avances de la medicina alópata y las terapias naturales, le presta especial atención a la nutrición sana y equilibrada, para detonar el potencial físico y mental en sus visitantes. La hospitalidad es un pilar fundamental, tanto las instalaciones —93 suites y 11 residencias de entre 300 m² y 500 m² con sala de fitness, cabina de tratamiento, baño turco o sauna, sala de cine, jardín privado y terrazas con piscina infinita—, como la ubicación y el servicio equivalen a las ofrecidas por un hotel de cinco estrellas. SHA Wellness Clinic se encuentra en una ladera con vista al mar Mediterráneo y al Parque Natural de Sierra Helada. Se encuentra en una zona con un microclima tan suave que favorece la oxigenación y la liberación de toxinas.
REMEDIO Y MEDICINA
Cuentan con cinco programas de salud específicos para los objetivos de cada huésped: Healthy Aging, Peso Óptimo, Intensivo, Detox y Rebalance, donde se ofrecen más de 300 tratamientos médicos y de bienestar, tales como hidrotherapy, fitness, terapias naturales, medicina estética, salud capilar y dental, medicina genómica y preventiva, desarrollo cognitivo y salud emocional. Cuentan con más de 35 médicos de tiempo completo de más de 40 nacionalidades diferentes.
¿CÓMO FUNCIONA?
Mily Antigua, la encargada de PR y Comunicaciones, nos cuenta que se contrata un programa de salud específico y con base en él se crea una agenda personalizada con los tratamientos y consultas pertinentes. Todos los asistentes ven a un médico internista; un médico revitalizante que vigila el tema detox; un nutricionista para crear menús específicos, además de las consultas con los especialistas de acuerdo a las necesidades de cada huésped. La alimentación es la clave.
La oferta gastronómica es sumamente saludable. “Hacemos una nutrición mediterránea, que de base es sana. Incluimos verdura, pescado, legumbres, cereales. También usamos ciertos productos como el miso, umeboshi, que es una ciruela específica de Asia; el kuzu, por sus propiedades medicinales. Hemos construido una carta internacional con nuestro método y nuestro
producto: tenemos platos franceses, cubanos, italianos, americanos y más”, nos cuenta el chef Lixi Lineas, head chef en SHA Wellness Clinic, quien añade que “al principio lo más difícil es hacer entender al huésped dónde está y romper los hábitos que tiene”.
Los programas suelen recomendarse al menos durante dos semanas para ver resultados significativos. El menú se cambia cada 14 días. Lixi refiere que la mayor parte de los asistentes aceptan el concepto. No hay alcoholes fuertes como vodka, whisky o ron, ni bebidas refinadas en la carta. “Tenemos vino y cerveza orgánicos, jugos naturales y tés medicinales que hacemos nosotros”, revela el chef.
El programa más importante es el de pérdida de peso, donde hay tres tipos de menú que se dividen en dos líneas, una gastronómica y una terapéutica: “En la línea terapéutica están los menús controlados por los nutricionistas; ahí tenemos tres opciones que van de la más estricta que se llama kushi, a la intermedia que es la biolight y el menú SHA”, dice el chef.
En cuanto a los postres, las fórmulas son distintas a las tradicionales porque no llevan azúcar, mantequilla ni huevo, pero lejos de lastimar el sabor, hace notar los efectos saludables del uso natural de la fruta. “Tenemos la tatin de manzana, el coulant de chocolate, la pavlova rusa de frutos rojos y merengue, el turrón clásico español, además de una línea de postres basados en frutas y vegetales, como el brownie de algarrobo y el carrot cake, etcétera”. cuenta Andrés Morán, pastry chef de SHA.