Michael Crespo

Sabores sencillos que acompañan un buen vino, es la visión de Michael para su primer proyecto.

MICHAEL SE ENAMORÓ DE LA COCINA a los 17 años. Nunca estudió profesionalmente, pero tuvo la fortuna de trabajar y aprender en los mejores restaurantes, como en St. John en Londres. Desde los 13 años comenzó a cocinar con su madre: “Era como un hobby de nosotros y de ahí yo pensé que podría ser eso, pero nunca imaginé que sería chef en México”.

De origen filipino, “Mikey” —como le dicen sus amigos— creció en California, comenzó su carrera en San Francisco y posteriormente viajó a Dinamarca y a Londres, donde aprendió nuevas técnicas culinarias. Luego regresó a Estados Unidos, a Nueva York, y durante ese tiempo vino a México un par de veces de vacaciones, donde se terminó quedando. “Nunca vi una ciudad como esta en mi vida. La comida es diferente. Me dieron la oportunidad de ser sous chef en un restaurante y de ahí pasé a crear Hugo”.

Hugo el Wine Bar nació a finales de febrero de 2021. Es un concepto casual, desenfadado pero que busca la calidad en cada comida y bebida que tienen disponibles, “es un bar de vinos. La comida es muy sencilla, pero que va muy bien con vinos naturales. Me dí cuenta que la comida simple, pero con mucho sabor, es perfecta para una barra de vino, que no sea tan difícil de entender, pero con un buen proceso, buenos productos y con poquita técnica. Hugo es un lugar para hacer las cosas bien, muy sencillo, con mucho amor y sabor”.

A pesar de la pandemia afirma que este año ha representado un nuevo inicio para él, un “restart en la vida”, en la que no solo los procesos de trabajo en la gastronomía se volvieron más higiénicos, sino que la perspectiva de las personas cambió: “Tuvimos que aprender a tener más paciencia en la cocina. Ahora necesitamos un equipo fuerte y el trabajo del chef es continuar este sentimiento de unidad”.