PROTEGER LA SALUD NUTRICIONAL
Esta es la fórmula ideal para las personas que no logran un estado de nutrición óptimo y requieren complementar su alimentación habitual.
Las fórmulas de alimentación enteral, o también llamadas dietas líquidas especializadas, son consideradas por la Food and Drug Administration de Estados Unidos (FDA) como alimentos para propósitos médicos especiales y están dirigidos intencionalmente a una enfermedad o condición con un requerimiento nutricional característico basado en evidencia científica.
En México reciben el nombre de fórmulas de alimentación enteral especializadas y son un apoyo nutricional en diferentes enfermedades. Registradas por la Comisión Federal para Prevención contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), son diferentes de los suplementos alimenticios, que no cuentan con evidencia científica sobre su utilización como parte de la terapia de recuperación de un paciente ante una enfermedad.
Es sabido que un adecuado estado nutricional puede mejorar la cicatrización de heridas, apoyar al desarrollo del sistema inmune, mejorar la fuerza muscular y en pacientes hospitalizados disminuye los días de estancia hospitalaria.
Este tipo de fórmulas ayudan a mejorar la ingestión de alimentos cuando por alguna enfermedad o condición de vida resulta más difícil cumplir con el requerimiento total del organismo o no se puede tener todos los tiempos de comida; por ejemplo, durante un tratamiento de quimioterapia, tras una cirugía o recuperación de alguna infección que aumenta sus requerimientos.
Y en ocasiones es difícil cubrir solo con la alimentación diaria, como es el caso de los pacientes que sufrieron Covid-19 o el de adultos mayores.
De acuerdo con la doctora Gabriela Quiroz Olguín N.C., dentro de los componentes de estas fórmulas se encuentran algunas que son altas en energía o proteína, lo que permite obtener buenas cantidades de nutrimentos en un bajo volumen de fórmula. Pueden estar o no adicionadas con ciertos nutrimentos que se han demostrado son de ayuda en ciertas circunstancias. Tal es el caso del omega-3 y la vitamina D, que tienen propiedades inmunoreguladoras y antiinflamatorias.
El omega-3 (puede ser EPA o DHA, por sus siglas en inglés) es un ácido graso esencial, esto quiere decir que nuestro organismo no puede producirlo y es necesario consumirlo de los alimentos como el pescado, nueces, chía y otras semillas. Este ácido graso es necesario para resolver la inflamación generada por ciertas condiciones (cáncer, enfermedades reumáticas, infección, obesidad, entre otras).
La vitamina D ayuda al buen funcionamiento del sistema inmune para mejorar nuestras defensas contra las bacterias y en diversos estudios se ha visto que su deficiencia puede incrementar las infecciones del tracto respiratorio. Es necesaria para una adecuada fijación del calcio en los huesos, reduce la resistencia a la insulina, mejora la fuerza muscular. Una de las más importantes fuentes de vitamina D es la luz solar, sin embargo, durante esta pandemia, el confinamiento no ha permitido que se tenga una adecuada exposición a la misma.
Si por alguna razón se piensa que no se está cubriendo una adecuada alimentación, tal vez sea necesario recurrir a este tipo de dietas líquidas, señala la doctora Gabriela Quiroz. La elección en el tipo y cantidad deberá llevarse a cabo por un especialista en nutrición, ya que es importante cubrir las deficiencias, pero también hay que tener cuidado con no exceder el consumo energético/proteico y de vitaminas y minerales. Para mayor información consulta a tu profesional de la salud y nutrición.
LAS FÓRMULAS DE ALIMENTACIÓN ENTERAL ESPECIALIZADAS CUBREN EL DÉFICIT DE CALORÍAS, PROTEÍNAS Y NUTRIENTES ESENCIALES.
logística en la distribución y compra de medicamentos. “El reto va a ser enorme. Birmex es el encargado de coordinar esto... y tampoco tiene una infraestructura para hacerlo. Ése es un reto mayor para México, sobre todo para que lleguen los productos en tiempo y forma a todos los lugares en donde se necesita, sin considerar los rezagos que ya llevamos en la licitación de UNOPS. Es verdaderamente insólito”, dice el representante de la Canifarma. Para consolidar el Sistema Nacional de Distribución de Insumos para la Salud, Birmex informó, en febrero pasado, la construcción de cuatro Centros Nacionales de Distribución, en colaboración con la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y el Instituto Politécnico Nacional (IPN). Los Centros Nacionales de Distribución tendrán la función de recibir e inspeccionar insumos médicos para su envío inmediato a los almacenes estatales y regionales de más de 25,000 unidades médicas de primero, segundo y tercer nivel. “Imagínate, empezar de cero, creando cuatro centros de distribución en el país. Es en verdad una locura. Eso te toma años, incluso décadas. Las empresas contaban con toda la infraestructura que ahora se quiere construir. “Hacerlo de cero es un reto enorme, más allá de toda proporción”, dice Rafael Gual Cosío. Forbes México solicitó una entrevista con Birmex, pero, hasta el cierre de este reportaje, no se había recibido respuesta.
DISPOSITIVOS MÉDICOS
La posición mundial que ocupa la industria de dispositivos médicos se debe, en gran medida, a la logística y distribución que emplea. “La logística es una parte fundamental de nuestro negocio”, dice Alejandro Paolini, presidente de la Amid. México ocupa la octava posición como productor y exportador de dispositivos médicos en el mundo y la primera en Latinoamérica. El valor de las exportaciones supera los 8,406 millones de dólares (mdd), de acuerdo con los últimos datos disponibles de Global Trade Atlas, publicados por la Canifarma Los miembros de la Amid, quienes representan a 40 empresas que conforman la asociación, cuentan con un total de 10,000 registros sanitarios en 75 especialidades médicas. “Estamos hablando de una variedad y cantidad de productos tremenda y todo lo que representa desde el punto de vista logístico para lograr que toda esa variedad de productos pueda llegar a los pacientes en tiempo y forma”, dice Paolini. México ha significado un “desafío adicional”, por la pandemia y por los cambios en el sector público en cuanto a las formas de contratación. “En el sector público, no siempre sucede de esa forma [como en el sector privado], lamentablemente. Y ése es un tema fundamental porque no se trata de tener un fabricante que tenga la mejor calidad de productos, sino que es importante tener un operador logístico que haga llegar los dispositivos”. Las nuevas formas de contratación sí representan un reto, como las compras que se están realizando con la UNOPS, mientras que no se establecen cantidades mínimas y no hay exclusividad, por lo que se pueden adquirir los productos con otros fabricantes que sean diferentes al adjudicado y se establecen cantidades exorbitantes en cuanto a lo que se está licitando. Además, el gobierno quiere usar sus propios operadores logísticos y se pierde el control sobre los productos. “Desconocemos cómo será el manejo del producto a partir del momento en el que nosotros lo entreguemos en determinado almacén”, dice. Cerca de 60% de las ventas nacionales se dirige al sector de salud privado y 40% al público, aunque su comercialización siempre había guardado cierto equilibrio hasta antes de la pandemia. El ejecutivo espera que en 2022 se pueda hablar de la actual emergencia sanitaria como un asunto superado, ya que aún es un tema al que debe de prestársele atención, aunque sí es más optimista sobre el futuro. Hoy, las personas comienzan a atenderse de otros padecimientos que no habían podido tratar por la pandemia. “Se pospusieron muchos tratamientos de enfermedades crónicas, como la diabetes o cosas de ese tipo […] Ya estamos volviendo, poco a poco, a la normalidad, y llevando los recursos desde el área de salud hasta sus destinos habituales”, comenta. Rafael Gual Cosío y Alejandro Paolini creen que la logística y distribución es fundamental, todo un reto para los sectores público y privado para llevar salud a toda la población de la República Mexicana, frente a las demandas del mercado.