Manuel Cojab: 15 años de desafiar al sector asegurador
A través de sus canales digitales, lleva su lucha contra las quejas hacia las aseguradoras a un nuevo nivel.
En el ranking de los abogados más populares, Manuel Cojab (@manuelcojab2.0) tiene un lugar asegurado. Durante la pandemia, decidió fortalecer sus canales digitales; hoy, cuenta con cerca de un millón de seguidores en sus redes sociales (Instagram, TikTok, Facebook y YouTube), desde donde aporta para una relación más justa entre asegurados y aseguradoras.
“Soy como una aspirina: la gente acude a mí cuando ya tiene el problema. Y para que me tengan en mente cuando el problema suceda, la mejor forma es llegar a ellos a través de redes sociales”, dice el especialista.
Con 15 años de experiencia en la rama de los seguros, Cojab aparece en su despacho de la colonia Condesa. Aquí cuenta su historia, empezando por los dos eventos canónicos que lo llevaron a ser uno de los pocos abogados 100% especializados en seguros.
“Mi abuela y mi mamá son actuarias. Un actuario es el que determina las fórmulas y le pone precio y valor a un seguro. Ellas me enseñaron a tomarle gusto a las matemáticas y, lo que muchos no dicen, es que para llevar asuntos de seguros necesitas entender de matemáticas tanto como de derecho”, explica el abogado.
Así es como Cojab se ha familiarizado con el porqué del precio de los seguros, los riesgos que asumen las empresas aseguradoras en cada póliza y lo que el asegurador puede reclamar cuando surge un litigio.
Más allá de la herencia familiar, el segundo parteaguas que encauzó la carrera de Cojab fue haber padecido el problema del reclamo de seguros en primera persona. Cuando estaba en la universidad, fue víctima del robo de su vehículo, lo que le llevó a solicitar apoyo de la aseguradora. Al llegar el ajustador, éste le comentó que, si no contaba con el duplicado de la llave, no podía proceder
el cobro de la póliza, asumiendo que en realidad el joven había vendido el auto y después lo reportó como robado.
“Me pareció muy extraño que el ajustador me interrogara de esa manera, después supe que más bien se trataba de un investigador que estaba buscando fallas en el proceso de reclamación para no hacer válido el seguro. Al final no cobré el seguro. Me la aplicaron, pero desde entonces se las he regresado 100 a 1”, evoca el litigante, que cuenta con más de 4 millones de likes en TikTok.
En México, las aseguradoras ocupan el segundo lugar entre las instituciones financieras con más quejas en contra, solo detrás de la banca comercial, de acuerdo con la Condusef.
Se calcula que la industria de los seguros recibe unas 30 mil reclamaciones cada año de usuarios descontentos, con más del 50% de estos casos en el rubro de seguros de auto.
“El problema de las aseguradoras es social, pues te venden un producto con muy buen marketing, pero lo que no te enseñan son las 60 páginas de condiciones y exclusiones a las que no les dan la misma publicidad”, lamenta el también autor de los libros Piensa como abogado y 180 Preguntas que le harías a un abogado.
Cojab asegura que, entre aquellas personas que no reciben lo que esperaban de su seguro, solo el 10% inicia un proceso legal.
“Las aseguradoras no son malas, al contrario; lo que creo es que están muy acostumbradas a omitir lo que deben hacer sus clientes en caso de cobrar el seguro, o qué no hacer para que no sea rechazado. Tal vez esto implicaría sacrificar ventas, pero es necesario informar a las personas. Como esto no pasa, ahí es donde yo entro”, sostiene.
FACILITAR EL ACCESO A LA JUSTICIA
En redes sociales, el experto comparte situaciones en las que los clientes se ven desfavorecidos por algún criterio o resolución tomado por la aseguradora en diferentes ramos de la industria aseguradora.
Las redes pueden funcionar como un vehículo de información, que, a su vez, sirve para facilitar el acceso a la justicia. Al hablar de la información poco transparente, Cojab recuerda el caso de una de las navieras más grandes del mundo, que inició un proceso legal después de que una de sus embarcaciones sufriera severos daños tras encallar y de que la aseguradora no hiciera válida la póliza.
El problema, recuerda el abogado, fue que la aseguradora argumentó no proteger a la embarcación fuera de aguas nacionales, pese a que la empresa había solicitado un seguro de cobertura en todo momento de su viaje. El proceso de venta de la póliza, con información engañosa o poco clara, incentivó a que el juez diera la razón a Cojab y a su cliente.
“Por cada caso como el de la naviera, hay miles de otros casos relacionados con seguros de gastos médicos, automóviles y de vida”, dice el experto.
El abogado reconoce que la cultura sobre los seguros no va a cambiar en el corto plazo, por lo que está decidido a mantenerse en redes sociales y a acompañar a sus clientes hasta las últimas instancias cuando su experiencia con el sector asegurador no ha sido favorable.