Anuncian acción legal tras muerte de mexicano a manos de la Policía
José Alfredo Castro Gutiérrez murió a manos de agentes que acudieron a su casa a petición suya
Luego de la muerte de José Alfredo Castro Gutiérrez, quien falleció tras ser abatido por oficiales de la policía de San Diego, el pasado 19 de octubre, la familia junto al Consulado General de México en San Diego anunciaron una acción legal contra la ciudad de San Diego, este jueves.
Esta acción es el paso administrativo requerido para una demanda en la corte federal, señaló Eugene Iredale, abogado consultor del Consulado General de México en San Diego, y asesor legal de las familia de Castro Gutiérrez.
La viuda del mexicano fallecido, Ana Ojeda, señaló que su esposo tenía miedo y pidió a sus amigos que llamaran a la policía, él pensando que la policía podía ayudarle.
“En lugar de la ayuda, él recibió dos balazos”, comentó Ojeda.
El mexicano de 39 años tenía residencia legal en Estados Unidos, mencionó Iredale, y era un trabajador de la construcción sin antecedentes penales, pero con un historial de problemas emocionales, y de enfermedades mentales.
“Su muerte no tenía porqué ocurrir”, comentó Iredale.
De acuerdo al abogado, los inquilinos que le rentaban al ahora fallecido, pidieron ayuda por una crisis emocional del mexicano.
“El fallecido también le estaba pidiendo a ellos que llamara a la policía porque pensaba que la policía le podía salvar de los miedos que tenía en su mente”, comentó Iredale.
Según el representante legal de la familia del mexicano, a las 04:45 horas del 19 de octubre, llegaron varias patrullas y por lo menos 7 policías a la residencia ubicada en la cuadra 300 de South Pardee Street en la comunidad de Mountain View.
De acuerdo a información de la policía de San Diego, oficiales respondieron a una llamada que primero fue reportada como un caso de vandalismo, pero que luego cambió a un disturbio violento involucrando un arma.
Las autoridades del Departamento de Policía de San Diego (SDPD, por sus
siglas en inglés) también revelaron un video sobre lo sucedido, en donde se mostró a múltiples oficiales usando diferentes métodos para abatir a Castro Gutiérrez cuando éste salió corriendo de una residencia, al responder a los llamados de la policía.
“En lugar de ver cómo acercarse y tratar de entender la situación, un oficial salió de la patrulla y le gritó a Alfredo que saliera y sin más instrucciones, él salió y empezó a correr pensando que podían ayudarlo, y su última palabra fue ‘ayuda’. Más que trágico, fue innecesario. Su última palabra cuando fue abatido fue ‘ayuda’”, señaló Iredale.
Los oficiales del SDPD señalaron que Castro Gutiérrez fue abatido por tres oficiales, uno que usó una descarga eléctrica, otro que usó un puf como armas no mortales, y otro oficial que emitió varios disparos golpeando al mexicano por lo menos una vez.
Castro Gutiérrez recibió primeros auxilios en el lugar y luego fue transportado a un hospital local donde sucumbió a sus heridas, señalaron las autoridades del SDPD.
El caso se encuentra bajo investigación por parte de la unidad de homicidios, de acuerdo a las autoridades del SDPD, y que ésta será revisada por la Fiscalía
del Condado de San Diego.
El cónsul general del Consulado de México en San Diego, Carlos González Gutiérrez mencionó que Castro Gutiérrez fue uno de tres mexicanos que murieron a manos de agentes en el último mes en San Diego y en Calexico, por parte de la policía de San Diego y la Patrulla Fronteriza.
El segundo caso fue David Ángel Villalobos, quien murió el pasado 23 de octubre a manos de un agente de la Patrulla Fronteriza cerca de la frontera con Tijuana, indicó el cónsul.
Y el 7 de noviembre, otro mexicano perdió la vida al ser atropellado por la Patrulla
Fronteriza en Calexico.
González Gutiérrez mencionó que el Consulado de México en San Diego pidió a las autoridades una investigación exhaustiva tras lo sucedido en cada uno de los casos.
“Pedimos que se tome la investigación con la seriedad que todas las investigaciones criminales lo requieren”, comentó el cónsul general del Consulado de México en San Diego.
Iredale mencionó que la familia busca más de una compensación, buscan una revisión de lo sucedido, y las lecciones que deja, de cómo manejar a las personas con problemas mentales en lugar de usar la fuerza.