MAGNÍFICAMENTE EXTRAORDINARIO
Justo cuando pensamos que Bvlgari no podía sorprendernos más, su última colección de joyería y relojes high-end llega al tope de la excelencia y el lujo. La creatividad y elegancia cobran vida en joyas únicas para difundir un mensaje de alegría después de un año que conmocionó al mundo.
Milán se convirtió por primera vez en el escenario para dar a conocer la última y más exclusiva colección de joyas de Bvlgari, Magnifica. Una selección de 350 obras maestras que son prueba irrefutable de que la excelencia y la belleza son conceptos que podemos llevar puestos. No solo es una colección de perfección artística, lujo y moda, también es un tributo a Milán por su coraje y lucha incansable tras vivir el peor escenario de la pandemia en Europa. Este lanzamiento es un hermoso mensaje de esperanza y determinación para el futuro que la casa romana entrega en forma de joyas preciosas.
Sin duda, esta colección marca un antes y un después en la trayectoria de la marca. Cada pieza de relojería y joyería tiene tatuado su ADN romano y los más de 137 años de experiencia en la creación de joyas insuperables. Muchos de los diseños están inspirados en la belleza de Italia, sus monumentos, historia y sus mujeres poderosas. Y para celebrar al máximo a esta ciudad, Magnifica está creada con las piedras más valiosas, raras y extraordinarias que la marca tiene en su haber. Definitivamente, el ingrediente principal para expresar audacia, creatividad atemporal y ese wow factor que quita el aliento.
Esos elementos exclusivos convierten a Magnifica
en la colección de joyería y relojes high-end más valiosa y preciada que Bvlgari haya hecho jamás. El valor recae en dos elementos principales: las joyas que valen cientos de miles de euros y las horas de delicado trabajo que igualmente fueron miles. La artesanía del lujo y la maestría italiana convierten a Magnifica en una colección como ninguna otra. Sus colores, piedras y diseños son una oda a sus musas, esas mujeres audaces y sin miedo que son un reflejo de la majestuosa ciudad eterna de donde Bvlgari tiene sus raíces, y toma gran mayoría de su inspiración: Roma.
Magnifica no puede hacerle justicia a su nombre sin piezas que tengan las gemas más raras y preciosas que los joyeros romanos han descubierto por todo el mundo. La firma no escatimó en usar tesoros inigualables, la colección tiene desde una espinela de 131.24 quilates hasta un cabujón de esmeralda colombiana de 93. La espinela es la cuarta más grande del mundo por peso en quilates, pero la más hermosa en cuanto
a calidad y transparencia. La esmeralda se incorpora en las mandíbulas de una seductora serpiente, ícono inconfundible de la casa joyera italiana. Por si fuera poco, incluye cinco turmalinas de Paraíba en corte ovalado, las gemas más raras y valoradas del mundo, uno de los descubrimientos gemológicos más bellos del siglo XX, incluso más valiosas que los diamantes. En total, suman alrededor de 500 quilates, según la inspiración de Magnifica su precioso color azul transparente y puro es un eco a las aguas cristalinas del Mar Mediterráneo.
Estas preciosas gemas de la naturaleza son glorificadas con el diseño y trabajo artesanal de los joyeros por igual. Si hay algo que no se le puede negar a la marca es su fina atención al detalle. El equipo de joyeros artesanos que trabaja desde el Bvlgari High Jewerly Laboratory en Roma es experto en transformar las ideas creativas y bocetos a verdaderas obras de alta joyería. Bvlgari trabaja a mano y sin acceso a computadoras para la creación de todas sus piezas, cada componente que forma parte de una joya terminada es hecho individualmente y es irrepetible. El trabajo artesanal impecable se traduce en joyas que se son una verdadera obra perfecta, única y eterna.
Fueron dos días de junio en los que Milán se vistió de gala para revelar al mundo a Magnifica de Bvlgari. Una presentación en la que participaron reconocidas embajadoras de la marca como Ester Expósito, Chiara Ferragni y Vittoria Puccini. La colección no solo enaltece la clase y el buen gusto italiano, es también una reconciliación con el presente. Un homenaje a una ciudad fuerte, un evento que nos recuerda que los tesoros del mundo son nuestros para disfrutar y que a pesar de los obstáculos que enfrentamos, aún hay lugar para la belleza abrumadora.