La cereza del pastel
Se dice que la tradición del pastel de bodas viene de la época romana, como un símbolo de prosperidad y dulzura para la nueva unión. Los pasteles de María Amaría son un reflejo de la nostálgica soñadora que los hornea (y planta), dándoles un sentido único según lo que ofrece la naturaleza en la temporada.
¿Cómo describirías el estilo de tu práctica? Imperfecto, fluido, orgánico, floral y espacial; contemporáneo, artístico, fuera de la norma.
Si estuvieras diseñando tu propio pastel, ¿cómo sería?
Visualmente imponente, sin parecer un pastel. grande, pero sin forma particular; decorado con frutas, vegetales y flores. Eso sí, muy importante que tenga una base interesante, alguna pieza de acrílico personalizada o alguna colaboración con marca de porcelana o madera que esté colocada en un punto central para que se vea como una escultura o parte de la decoración.
¿Qué recomendaciones le darías a una novia al momento de diseñar su propio pastel?
Absorber toda la inspiración de afuera que la hace sentir muy ella (texturas, sabores que tal vez no sean asociados a pasteles, elementos, formas, colores), para traer toda esa información a la mesa y empezar a idear el pastel que sea una representación de los novios, en balance con toda la celebración.
¿Cuáles son los estilos más actuales? Vamos hacia más juego de escalas (pasteles largos o en forma de cono al estilo croquembouche); formatos y presentaciones grandes estilo festín, proyectos más artesanales, elementos interactivos que sean el centro del momento (decoración de pastel en sitio, o que los invitados puedan ellos mismos cortar su rebanada). ¡Comida de verdad! Nos olvidamos que en los pasteles muy altos la mayoría de los pisos son falsos.
Cuando un día de fiesta no basta, las bodas de destino son la oportunidad perfecta para crear una experiencia 360° alrededor de la ceremonia. Jesse Tombs es el experto en bodas de destino, que conoce los mejores rincones en el mundo para hostear una noche inolvidable. ¿Qué te motivó a iniciar una firma para la planeación de bodas de destino?
Me encanta que esta industria incorpora todas las cosas de la vida que más amo y disfruto: deliciosa comida y vino, viajes, arte, diseño y flores. Pero sobre todo: unir a la comunidad y seres queridos para celebrar los momentos más divertidos de la vida.
Además de la locación, ¿cómo creas una experiencia única en un destino?
Creo que abrazar la cultura local es importante para que los eventos tengan un sentido de pertenencia al lugar y puedan ser conocidos a través del evento. También es muy importante tener en cuenta la época del año, el clima puede limitar muchos aspectos,
pero también puedes usarlo a tu favor. Conoce cómo se siente y ve el destino en todo momento del evento: ¿a qué hora es el atardecer? ¿Cuándo hay mayor tráfico? ¿Qué tan céntrico es? Todo importa.
También nos encanta incorporar tradiciones locales (como la música de la región) a los eventos. Esto permite que los invitados echen un vistazo a cómo celebran los locales. Trabajamos también con granjas de la zona para obtener ingredientes, vinos y flores, por lo que todos los elementos son originarios del lugar y se adaptan a la temporada y la ubicación. Es una forma divertida de permitirles explorar el destino de una manera diferente: sitios que estén conectados con la boda, que se sientan auténticos y que sigan una narrativa. Por ejemplo, van a una cata de vinos a una bodega local y luego servimos ese mismo vino en la cena de bodas.
¿Has notado una mayor demanda en decoración eco-friendly? Totalmente. Hacemos la mayor cantidad de sugerencias posibles que tengan el menor impacto en nuestro medio ambiente. Prácticas como elegir flores de temporada y colaborar con productores locales no sólo ayuda a compensar las emisiones de la huella de carbono, también apoya a la economía del lugar.
Cinco cosas que nunca harías en tu propia boda.
Demasiados brindis o discursos... dejaría los micrófonos afuera. Siempre debe haber suficiente comida y bebida disponible durante todo el tiempo. No escatimaría en las luces, el mood del evento puede llegar a depender totalmente de qué tan bien iluminado está. Nunca seguiría un tema o tendencia de diseño, una boda debe sentirse como atemporal y significativa para los años siguientes, las trends vienen y van. Finalmente, cambiaría el pastel por helado.