Aseguran que todavía hay vaquitas marinas en Alto Golfo de California
No se sabe cuántas, solo que todavía hay vaquitas marinas en el Alto Golfo de California, ya que desde el 2008 cuando se contabilizaron 19, no se ha hecho otro estudio, este año se pospuso por la pandemia, señalaron autoridades.
Expertos en medio ambiente cuestionaron que el peligro de extinción de la vaquita marina sea responsabilidad exclusiva de los pescadores de San Felipe, esto durante una mesa de trabajo para atender sus problemáticas, organizada por el Congreso del Estado.
Manuel Galindo Bect, del Instituto de Investigaciones Oceanológicas de la UABC, señala la necesidad de realizar un estudio para determinar qué tanto depende la vaquita marina del agua del Río Colorado.
Galindo defiende que la disminución de su población es multifactorial, y no solo responsabilidad de los pescadores, por lo que urge un estudio de isótopos de oxígeno para saber la dependencia o no de la vaquita con el flujo del Río Colorado, tal como se hizo con totoaba.
Armando Jaramillo Legorreta, representante de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), y experto en mamíferos marinos, declaró que la última estimación de la población de la vaquita, fue menos de 19.
Sin embargo sí se han dado avistamientos, este año estaba planeado un estudio, pero fue pospuesto debido a la pandemia Covid-19.
Bect señaló que si la vaquita necesita del agua salada del mar, y agua dulce del río, su hábitat ya no existiría, por ello, se trataría de una responsabilidad binacional, y que las políticas públicas han estado mal encaminadas.
“Los estuarios son zonas de crianza, y reproducción, al modificarlo hay mayor mortandad, no es posible que al desaparecer su hábitat no le afecte que porque dicen que están gorditas, es algo fuera de ciencia”, señaló.
El representante de la Conanp contestó al académico, que las políticas públicas deben realizarse con base a información avalada, y no solo suposiciones o creencias, ya que actualmente no hay información validada que compruebe que el agua del Río es un factor.
“Sería nefasto que se tomen decisiones con base a suposiciones, ahora se toman decisiones con información generada científicamente a lo largo de 23 años”, abundó Jaramillo.